Desde hace unos años, funcionan multitud de servicios sustitutivos del taxi tradicional. Basados en el ahorro en costes que suponen las economías colaborativas, son los propios usuarios quienes los ofrecen a otras personas. Y pese a los innumerables beneficios que tienen, poco a poco estas plataformas se han ido convirtiendo en competencia directa del servicio convencional de taxi, dando lugar a muchos debates sobre su legalidad. El aumento de esta oferta ha coincidido con el incremento del uso del smartphone en la población española comprendida entre los 16 y los 65 años, y que ha alcanzado un 94% en este último año. De hecho, son servicios cómodos y sencillos de contratar, ya que siempre brindan la posibilidad de pedir o reservar un vehículo a través de una aplicación móvil. En este artículo se detallan cuatro de las más interesantes.
1. Cabify
Cabify es un servicio que, mediante una app, permite la contratación de vehículos de gama alta con chóferes privados (no particulares) y determinados taxistas asociados a ella, controlando en todo momento su ubicación a través del móvil.
Creada por un grupo de jóvenes emprendedores, se presenta como una alternativa real a los taxis tradicionales. El pago es seguro a través de PayPal o tarjeta de crédito y, una vez que el usuario se registra en la plataforma, ya no es necesario realizar ninguna transacción con el conductor.
Sus precios, según la empresa española, son un 20% de media más baratos que los de un taxi normal.
2. BlaBlaCar
En un principio, BlaBlaCar surge como un servicio francés de coche compartido que hace posible que las personas que quieren desplazarse a un mismo destino en un momento concreto puedan organizarse para viajar juntos. En este sentido, esta aplicación pone en contacto a particulares donde cada usuario anuncia el trayecto que realizará, el número de plazas disponibles y el coste por asiento.
Sus principales ventajas es que posibilita compartir los gastos puntuales del viaje (combustible y peajes) y que sus usuarios elijan entre organizar un viaje y buscar un viaje, al mismo tiempo que fomenta el uso compartido de cada automóvil con el objetivo social de reducir la emisión extra de gases de efecto invernadero.
3. Car2go
Car2go es un servicio de alquiler de coches descentralizado, es decir, los automóviles se encuentran por toda la ciudad y el usuario utiliza una aplicación móvil para localizar la ubicación del vehículo más cercano y acceder a él. La app permite reservarlo durante un periodo de 20 minutos sin que este tiempo cuente como alquiler. Una vez que el usuario empiece a circular con el coche, solo paga por los minutos usados.
Car2Go se ha expandido por diferentes urbes europeas. Cada una de ellas tiene un precio por minuto diferente, pero la gran ventaja es que cualquier usuario registrado puede alquilar cualquier vehículo Car2go del mundo.
4. Hailo
Hailo surge en Londres en 2011 a través de tres taxistas y tres emprendedores. Se trata de la evolución digital de la típica llamada para pedir un taxi. A través de una aplicación, el usuario solicita un taxi y se pone en contacto con un taxi autorizado en menos de dos movimientos.
Hoy en día está presente en Barcelona y Madrid, aunque tiene previsto seguir con su expansión internacional.