Según el ‘VII Informe ¿Qué tres deseos le piden al nuevo año las personas con discapacidad?‘ elaborado por la Fundación Adecco, el 62% de las personas encuestadas opina que la discapacidad es un obstáculo para encontrar un puesto de trabajo. Pese a la tendencia ascendente en la contratación de personas con discapacidad, su tasa de actividad se sitúa 44 puntos por debajo de la tasa de actividad de las personas sin discapacidad. En este artículo se cuenta cuál es la realidad del empleo para las personas con discapacidad y qué medidas proponen para favorecer su inclusión en el mercado laboral.
A pesar de que 2016 cerró con una cifra récord en la firma de contratos para personas con discapacidad, un 86% de los encuestados por la Fundación Adecco cree que las empresas no están lo suficientemente concienciadas sobre los beneficios que a nivel organizacional tiene la contratación de personas con discapacidad y que solo lo hacen para cumplir la Ley General de Discapacidad (LGD). Por eso, el 77% asegura que es fundamental seguir promoviendo campañas de sensibilización y educando en torno a la discapacidad desde la infancia.
Una visión panorámica del empleo y la discapacidad
El último ‘Informe del Mercado de Trabajo de las Personas con Discapacidad‘, elaborado en 2016 por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) y que recoge datos de 2015, aborda una perspectiva general de cómo es la situación laboral para este colectivo con mayor dificultad de acceso al mercado de trabajo.
Estos son algunos de los aspectos que destaca:
- Su tasa de actividad se sitúa en un 33,9%, 44 puntos por debajo de la tasa de actividad de las personas sin discapacidad. Su tasa de paro es del 32,25%, superior en casi ocho puntos a la del resto de la población.
- Las dos terceras partes de los trabajadores están contratadas en el sector privado, sobre todo en el sector servicios.
- Existe una gran desigualdad en la contratación de hombres y mujeres, con un reparto del 61% y el 39%, respectivamente.
- Las contrataciones a universitarios es, en proporción, la mitad entre las personas con discapacidad que entre las personas sin discapacidades.
- Solo el 8,51% de los contratos realizados a personas con discapacidad son indefinidos, porcentaje algo superior al del resto de la población.
- Las titulaciones donde se contabiliza un mayor número de personas con discapacidad paradas son en Formación Profesional el caso de Técnico en Gestión Administrativa y de Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería, y en titulaciones universitarias, el mayor número se concentra en Licenciatura de Derecho y en Maestro de Educación Infantil.
- Las ocupaciones que más contratos registran son las que tienen poca cualificación profesional, como personal de limpieza de oficinas y hoteles y peones de las industrias manufactureras.
Medidas para favorecer la inclusión laboral de las personas con discapacidad
Un 62% opina que la discapacidad es un obstáculo a la hora de encontrar un puesto de trabajo y el 54% menciona esta variable en uno de sus tres deseos (junto a la salud y otros deseos personales), haciendo hincapié en la necesidad de que este sea estable, igualitario y acorde a sus competencias profesionales. Entre las medidas sugeridas están:
- La sociedad en general y las empresas en particular deberían reconocer sus capacidades y talento olvidando conceptos que tradicionamente han ido ligados a la discapacidad como la dependencia, la inactividad o la formación poco cualificada.
- Dejar atrás la idea de que las personas con algún tipo de discapacidad solo pueden acceder a puestos de trabajo de poca responsabilidad. Reconocer en el mercado laboral que las personas con discapacidad también tienen responsabilidad, capacidad de trabajo en equipo, motivación constante, compromiso, ilusión, una actitud madura y renovación continuada de sus conocimientos.
- Eliminar del lenguaje colectivo términos peyorativos que aún se utilizan, como minusválido, y mostrar mayor concienciación desde los medios de comunicación.
- Dar más voz a las personas con discapacidad en el ámbito público, institucional y privado. El 86% de los encuestados asegura que no se les escucha más allá de las ONG.
- Seguir haciendo campañas de sensibilización para que las empresas conozcan todas las ventajas que tiene la contratación de personas con discapacidad, desde el punto de vista fiscal, organizacional y de ambiente de trabajo.
- Se necesitan más recursos para ayudar a las personas con discapacidad en su búsqueda de empleo. A veces, la sobreprotección en su desarrollo vital les impide desenvolverse por sí mismos, tienen miedo a ser rechazados.
- Revisar la política de prestaciones para evitar la inactividad permanente. La llamada «cultura del subsidio» que garantiza unos recursos mínimos provoca que algunas personas no busquen nunca trabajo.
- Formación en habilidades sociales. Seis de cada diez personas piensan que es importante formar a las personas con discapacidad en habilidades sociales para facilitar la búsqueda de empleo.
- Facilitar y concienciar a las personas con discapacidad sobre el uso de las redes sociales como canal principal para la búsqueda de trabajo. Solo el 40% de los parados con discapacidad utiliza las redes sociales para buscar empleo, frente al 83% de la población general.