Cardo con salsa de almendras
Elaboración
Cocemos los tallos del cardo pelados y troceados en rectángulos de 3 x 5 centímetros (aproximadamente) en una cazuela con abundante agua, sal, unas gotas de aceite y una cucharada de harina para que se ablande. Escurrimos del agua de cocción, deslavamos por agua fría y volvemos a escurrir el cardo.
Para preparar la salsa de almendra, cortamos muy finamente un cuarto de cebolla en brounoisse junto con un par de dientes de ajo. En una cazuela no muy baja preparamos el sofrito de cebolla con un par de cucharadas de aceite de oliva y una cucharada de mantequilla. Cuando el sofrito haya adquirido un color dorado, agregamos las almendras crudas, peladas y machacadas. Sofreímos el polvo de almendra unos instantes y añadimos la harina. Rehogamos todo el conjunto. Ligamos el sofrito de almendra y vertemos la leche, dando vueltas al conjunto hasta que se forme una crema tipo bechamel que pondremos a punto de sal cuando esté cremosa.
Salteamos el cardo unos segundos en una sartén con una cucharada de aceite de oliva, el jamón serrano cortado en taquitos y una pizca de ajo troceado diminuto. Salteamos lo justo para que coja color la superficie del jamón y del cardo. Inmediatamente vertemos la crema de almendra, ponemos a punto de sal y espolvoreamos unas hojas de perejil troceadas. Esperamos que la cazuela repose unos instantes fuera del fuego y servimos a continuación. Podemos preparar una versión vegetariana sin jamón, sustituyéndolo por trocitos de manzana o de pera salteadas junto con el cardo, o podemos elaborar una versión un poco más sabrosa sustituyendo el jamón por unas gambas o unas colas de cigalas peladas.
Semáforo nutricional
El semáforo nutricional es un sistema de colores que permite entender los valores nutricionales de una forma clara, rápida y completa.
Una ración contiene
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal |
---|---|---|---|---|
221 | 14g | 3,2g | 7,8g | 0,6g |
11% | 20% | 16% | 9% | 10% |
* de la ingesta de referencia (IR) para un adulto
- Baja: el 10% o menos de la ingesta de referencia
- Media: entre el 10% y el 35% de la ingesta de referencia
- Alta: más del 35% de la ingesta de referencia
Las recetas presentan normalmente ingredientes cuyo porcentaje sobre la Ingesta de Refencia (IR) es alto (predominan amarillos y naranjas). Estos platos están concebidos como plato principal de una comida o cena, con lo que su tamaño de ración es superior y su aporte nutricional es más elevado.
Por este motivo, las recetas tienen puntos de corte diferentes a los de los productos. Así, por ejemplo, mientras que un alimento cualquiera tendrá los nutrientes de color amarillo hasta un valor máximo del 20% de la IR, las recetas concebidas como una comida principal tendrán los nutrientes en amarillo hasta un valor máximo del 35% de la IR.
Calorías | Grasa | Grasa saturada | Azúcares | Sal | |
---|---|---|---|---|---|
Qué es bajo por ración | 200 Kcal o menos | 7 g o menos | 2 g o menos | 9 g o menos | 0,6 g o menos |
Qué es medio por ración | Entre 200 Kcal y 700 Kcal | Entre 7 g y 25 g | Entre 2 g y 7 g | Entre 9 g y 32 g | Entre 0,6 g y 2,1 g |
Qué es alto por ración | 700 Kcal o más | 25 g o más | 7 g o más | 32 g o más | 2,1 g o más |
Nutrientes | Cantidad Diaria Orientativa |
---|---|
Calorías | 2.000 Kcal |
Grasa | 70 g |
Grasa saturada | 20 g |
Azúcares | 90 g |
Sal | 6 g |
La Ingesta de Referencia (IR) es una guía sobre la cantidad total de calorías y de varios nutrientes que debemos ingerir al día para mantener una dieta sana. La información sobre los porcentajes de IR indica lo que supone la cantidad de nutriente de una ración respecto a la IR para ese nutriente en el día.
Los porcentajes de Ingesta de Referencia (IR) están calculados para una mujer adulta con una ingesta diaria de 2000 Kcal. Las necesidades nutricionales individuales pueden ser más altas o más bajas, en función de sexo, edad, nivel de actividad física y otros factores.
Desde un punto de vista nutricional, el cardo es como una hortaliza, es un vegetal bajo en hidratos de carbono, proteínas y grasas. Así pues, el contenido calórico final es muy bajo. Es muy rico en agua, lo que supone importantes beneficios diuréticos para el organismo. Es rico en hierro y calcio y presenta un destacado contenido en vitamina C. Destaca además por su capacidad hepatoprotectora, ayuda a proteger el hígado. Se prepara con jamón serrano, lo que suma vitaminas (principalmente del grupo B y, sobre todo, la vitamina B6). Es fuente de fósforo, zinc y hierro, pero también de grasa y colesterol. Se prepara con salsa de almendras, un fruto seco de gran importancia para nuestro organismo, ya que contiene grandes dosis de fibra, proteínas de elevado valor biológico, vitaminas B y E y minerales como el calcio, fósforo, magnesio, zinc o hierro, y son fuente de energía. Sin embargo, se prepara con salsa, lo que se añade mantequilla, harina y leche, con lo que se suman grandes cantidades de grasas saturadas y calorías. En definitiva, es una receta algo calórica y con un contenido en grasa destacable.
- Alergia al huevo
- Alergia al pescado
- Anemia ferropenica (falta de hierro)
- Anemia perniciosa (carencia de vitamina B12)
- Anemia por carencia de ácido fólico
- Estreñimiento
- Hipertensión arterial
- Osteoporosis
- Ácido úrico y gota
- Alergia a la caseína
- Cálculos en la vesícula biliar
- Cálculos renales
- Diabetes mellitus
- Gastritis
- Hipercolesterolemia
- Hipertrigliceridemia
- Intolerancia a la lactosa
- Intolerancia al gluten (celiaquía)
- Meteorismo
- Obesidad o sobrepeso