1. Cefalohematoma
👉 Por qué se produce
¿Tiene tu bebé una bolita en la cabeza? ¡No te alarmes antes de tiempo! Un parto complicado puede provocar pequeñas lesiones en el bebé. A veces, por la aplicación de fórceps, puede producirse una hemorragia en la superficie de un hueso del cráneo, habitualmente el parietal, llamada cefalohematoma y que se manifiesta por un bulto que va formándose en su cabeza horas después de su nacimiento.
👉 Cómo se trata
Por lo general, no requiere ningún tratamiento y la sangre tarda de dos semanas a tres meses en reabsorberse. Pero, por supuesto, no debes dejar de acudir al pediatra para que sea valorado y controlado por este profesional.
2. Fontanela
👶 Qué es la fontanela y cuál es su tamaño normal
Las fontanelas son las separaciones que se observan, entre 12 y 18 meses, entre los huesos del cráneo de un bebé, en el sitio donde después se formarán las suturas. La evolución del tamaño de las fontanelas puede poner al pediatra en la pista de una enfermedad, pero el hecho de que al nacer sea muy grande, si el tamaño de la cabeza es normal, no significa nada, salvo que probablemente tardarán más tiempo en cerrarse.
👶 Qué puedes detectar en las fontanelas
- Una fontanela continuamente abombada o con una protuberancia podría indicar un exceso de presión en el interior del cráneo.
- En las deshidrataciones, sucede lo contrario y la fontanela se hunde. Pero ambas situaciones se acompañan de otros síntomas importantes.
- Es normal que la fontanela abulte, sobre todo, cuando lloran; y también que se la vea subir y bajar como si latiera, cuando están chupando con fuerza o se les tiene en brazos en posición vertical.
3. Lagrimeo
El conducto por donde las lágrimas desaguan en la nariz puede hallarse obstruido en algunos peques, causando un excesivo lagrimeo al que pronto se añaden legañas e infecciones repetidas.
Para solucionarlo, si el problema es benigno y poco urgente, suele bastar con colirios antibióticos y masajes para recanalizar el conducto.
⚠️ ¡Importante! Cuando a un bebé, además de lagrimear, le molesta mucho la luz, debe ser valorado con urgencia por el especialista.
4. Orejas de soplillo
Las orejas despegadas (o de soplillo) tienen tendencia a hacerse más discretas a medida que el niño se va haciendo mayor.
En todo caso, pueden corregirse a partir de los cinco años por medio de una sencilla operación. El clásico remedio casero de adherirlas con esparadrapo al cráneo no sirve para nada.
5. Perlas de Epstein
👉 Qué son las perlas de Epstein
En la encía y en el paladar del recién nacido se observan con cierta frecuencia unos nódulos blanquecinos o amarillentos del tamaño de un grano de arroz, llamados nódulos de Bohn o perlas de Epstein, según se hallen en encías o paladar. Son pequeños quistes de queratina, que desaparecen antes de quince días.
👉 Qué se debe hacer
Una perla de Epstein puede confundirse con un auténtico diente. Es algo muy raro pero posible, pues un bebé puede nacer con un diente o le puede crecer uno durante el primer mes de vida. Como en estos casos pueden estar mal anclados, lo más probable es que los dientes deban ser extraídos para evitar que el peque los trague.
6. Candida albicans
👶 Qué es y qué provoca la cándida
Después de una toma de leche, pueden quedar restos en el interior de la boca del bebé. Pero si están fuertemente adheridos y no se pueden desprender con facilidad pasando la yema del dedo, lo que ocurre es que tiene una infección de la mucosa bucal causada por un hongo llamado Candida albicans.
En muchos lugares es conocida como muguet, por el color blanco y el aspecto moteado que las flores de esa planta tienen.
Aunque algunos niños no parecen tener molestias por su causa, puede dificultar su alimentación, por lo que deben seguir un tratamiento.
👶 ¿Cómo se trata?
- Los bebés deben ser tratados con un gel antifúngico y mojando el chupete (si lo usan) en agua bicarbonatada después de hervirlo.
- El pediatra comprobará también que el área del pañal se halle libre de signos de infección por cándidas, porque estos hongos crecen con mucha facilidad en las zonas húmedas.
- Si está mamando, es recomendable que también la madre se ponga una pomada antifúngica en los pezones, pues, con toda probabilidad, también estarán infectados.