Agrandar visualmente la estancia puede conseguirse de muy diversas maneras. Podemos tratar de agrandarla a través del suelo, colocando un revestimiento, ya sea de madera o cerámico, de menor tamaño que el habitual.
Otro truco muy empleado es colocar espejos, por lo que ubicar un vestidor en alguna estancia de reducido tamaño es una buena opción, sobre todo si es el recibidor.
Una iluminación adecuada también nos ayudará a conseguir nuestro objetivo. Las lámparas de focos orientables, que podamos dirigir hacia el techo, harán que éste parezca más alto, lo mismo sucederá si los enfocamos a las paredes de la estancia, que se mostrará más espaciosa.
Para los rincones sin uso, puede optar por colocar una zona de lectura, o bien una lámpara con bombillas incandescentes de color amarillo, que consigue un efecto más íntimo y armonioso. También puede disponer una lámpara con mampara que ilumine el suelo sobre una mesilla, en la que colocar algún ejemplar colgante como el potos o ejemplares variegados.