Colorido asegurado con la arbustiva verónica

Proporcionarle humedad y resguardarla del frío, principales preocupaciones
Por EROSKI Consumer 29 de diciembre de 2003

Si ser está buscando alguna planta bien sea perenne o anual, dependiendo de la especie, que presente un aspecto arbustivo o de matorral, sea de fácil mantenimiento y ofrezca excelentes resultados, esa es la verónica, cuya variedad azul es conocida también como hebe officinalis.

Esta planta, perteneciente a la familia de las escrofulariáceas, presenta un tallo rastrero y una altura máxima de unos 50 centímetros en las variedades más grandes. Para describir su follaje se puede decir que las hojas poseen un borde dentado, una forma oblonga y son ligeramente pilosas. En cuanto a sus preciosas flores, éstas se caracterizan por aparecer en espigas terminales sostenidas por cortos pedúnculos, ofreciendo siempre un bonito colorido que varía según la especie, aunque los más habituales son el blanco, el lila o el rosa.

Pese a tener sus orígenes localizados en zonas tan peculiares como Oceanía y Sudamérica, la verónica no tiene muchas exigencias en cuanto a las condiciones del suelo, se adapta fácilmente a casi cualquier superficie, basta con que el terreno de cultivo sea blando y esté bien drenado. Si se quiere se puede añadir algún fertilizante mineral para que esta planta crezca más enérgicamente.

Prestando atención a sus orígenes se puede llegar fácilmente a la conclusión de que esta arbustiva requiere cierta humedad ambiental y un suelo que se mantenga fresco, por lo que los riegos es conveniente que sean abundantes, especialmente en los meses en los que los termómetros alcanzan sus valores más elevados, mientras que durante el resto del año será suficiente con aportar agua dos veces por semana.

Esta planta también requiere estar situada preferentemente en zonas a media sombra, aunque no sufrirá, si los rayos del sol inciden directamente sobre ella. En general, prefiere los climas templados tendiendo a calurosos, por lo que será recomendable protegerla en época de heladas, bien introduciéndola en el interior de la casa o cubriéndola si se encuentra en el exterior.

Por último, es aconsejable saber que, además de las virtudes ornamentales de esta planta, la verónica es un ejemplar al que recurre la medicina para ser empleada tanto como anticatarral como para solucionar problemas digestivos.

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