El repollo o col (Brassica oleraceae) es una hortaliza perteneciente a la familia de las brasicáceas. Es un ejemplar bienal, aunque suele ser cultivado como anual para conseguir una cosecha al año, algo sumamente factible debido a que si la asentamos en el sustrato adecuado, y recibe agua suficiente, su cultivo es muy sencillo.
La planta dispone de unas hojas ovales, oblongas, lisas, con una terminación rizada o circular, dependiendo de la variedad que estemos observando, que conforman un característico cogollo compacto.
Las diferentes variedades existentes han sido obtenidas a partir de la especie silvestre, a través de cruces y selección, para conseguir adaptarlas a diferentes condiciones climáticas. Hay dos variedades principales de repollos: las tempranas y las tardías.
Consejos de cultivo
La col, berza o repollo contiene el doble de vitamina C que la naranja, por lo que se trata de una hortaliza cuyo consumo es muy recomendable. Además es una bella planta ornamental.
Si quiere cultivarla en su huerto o jardín deberá emplazarla en un lugar no demasiado caluroso, y en el que reciba agua de la lluvia o en el que pueda proporcionarle riegos de manera regular. Se adapta bien a casi todas las zonas climáticas. Siempre y cuando le aportamos la ubicación y condiciones anteriormente mencionadas, fructificará sin problemas.
Requiere de un terreno firme, arcilloso y fértil. Es recomendable cultivarla cada año en un emplazamiento diferente, porque absorbe y agota con gran rapidez los nutrientes que requiere para subsistir.
Deberá sembrar las semillas a voleo si va a cultivarla en un clima no demasiado caluroso. De lo contrario lo más adecuado será comprar plantones y sembrarlos entre septiembre y octubre.
Recolecte las coles cuando tengan un caparazón compacto, pero antes de que se formen flores.
Si consulta la sección de alimentación de esta web encontrará multitud de recetas que emplean como base esta suculenta hortaliza.