Una vez que se ha logrado que las plantas florezcan resulta muy importante conocer una serie de trucos para conseguir mantener la floración el mayor tiempo posible. No obstante, resulta difícil poner en práctica esta serie de consejos si se trata de plantas que se desarrollan sobre la tierra en lugar de en macetas, ya que prácticamente resulta un requisito imprescindible el poder moverlas.
Deberá colocar sus plantas en un emplazamiento protegido, con la máxima iluminación posible, aunque no deben recibir la luz directa del sol, ni siquiera a través de cristales, que actuarían como una lupa y perjudicarían aún más a los ejemplares, pudiendo llegar a quemarlos. Además puede protegerlos del frío colocando una plancha de corcho bajo la maceta y acolchando su superficie.
Será muy importante mantener una temperatura entre los 16 y los 18 grados centígrados, intentar que el ambiente permanezca lo más estable posible y evitar moverlas una vez que se les haya otorgado una ubicación luminosa. Asimismo las plantas deben estar lo suficientemente hidratadas a lo largo de todo el año. Tampoco se debe descuidar la aportación de nutrientes extras al sustrato a través de abonos. Es imprescindible abonarlas cuando se estén formando los capullos de flor o los ejemplares se encuentren en plena floración.