Los disolventes son sustancias químicas esenciales a la hora de realizar un trabajo con pintura. Resultan de gran utilidad para rebajar la consistencia de lacas, pinturas y barnices. Pero son muy versátiles, y el hecho de ser abrasivos los convierte también en decapantes perfectos para eliminar la pintura antigua. En este artículo te explicamos las características de los disolventes más utilizados y su importancia durante la tarea de pintado tanto de metal, madera u otros materiales.
✅ Qué es un disolvente
Los disolventes son sustancias que se mezclan con la pintura y nos facilitan su aplicación, al hacer las pinturas, lacas y barnices más ligeros y menos viscosos. Además, mejoran de manera notable el acabado, por lo que son muy utilizados. Todos los disolventes se evaporan al secarse, por lo que su única utilidad es facilitar la aplicación de la pintura.
A la hora de incorporar el disolvente a la pintura, conviene tener en cuenta el porcentaje que señala el fabricante, para que su efectividad sea completa.
Los disolventes funcionan también muy bien para el decapado, por lo que se utilizan para retirar pintura antigua de muebles, por ejemplo. Y son, además, idóneos para la limpieza de rodillos, brochas y demás herramientas al finalizar el trabajo.
✅ Agua, para pintura plástica
El agua es el disolvente más común para las pinturas plásticas. Estas son las más utilizadas para la pintura de paredes y techos, de fachadas... Su uso es muy sencillo, y únicamente hay que prestara atención a no utilizar demasiada agua.
✅ Aguarrás
El aguarrás es quizás el más típico de los disolventes. Este líquido incoloro, de un olor muy característico, soluble en agua y en hidrocarburos, sirve como disolvente para pinturas en general, pero sobre todo para las oleosas y las sintéticas, así como barnices.
¿Cómo usarlo? Lo aconsejable es diluir una o dos partes de aguarrás por cada diez de pintura.
Existen dos tipos de aguarrás: vegetal y mineral.
- El vegetal también se llama trementina, miera o esencia de pino, porque se obtiene de la destilación de la resina de estos árboles, así como de otras especies (abetos, alerces y terebintos).
- El mineral, por su parte, se produce con derivados del petróleo, y en general se considera un sucedáneo del vegetal.
👉 ¿También sirve para quitar barniz?
El aguarrás puede usarse también como decapante, para retirar pintura y barniz. Según el tratamiento que haya recibido la madera, será más o menos fácil retirarlo con aguarrás, o se necesitará acetona, decapantes en gel…¡ o incluso alcohol!
Lo más conveniente es hacer una prueba en un pequeño lugar y ver si el aguarrás ejerce el efecto deseado.
✅ Acetona
La acetona comparte algunas características con el aguarrás: es un líquido incoloro, volátil, con un olor muy característico, altamente inflamable y soluble en agua. En este caso, su principal uso consiste en suprimir la pintura seca, ya que sus cualidades químicas lo convierten en un decapante estupendo.
Para aplicar este disolvente, se extiende la acetona varias veces con un trapo o con pinceles sobre la superficie de la que se desea quitar la pintura antigua. Una vez que la zona esté bien impregnada del líquido, se rasca la superficie con un cepillo de cerdas metálicas u otra herramienta que funcione como rascador.
✅ Diluyente celulósico
Esta sustancia formada por acetona y ésteres (compuestos orgánicos derivados de ácidos orgánicos e inorgánicos, como el acetato) se utiliza de forma específica para acabar con las manchas frescas de las pinturas celulósicas.
Como en el caso del aguarrás, este diluyente celulósico también se puede emplear para limpiar los utensilios de pintura habituales.
✅ Diluyente sintético
El diluyente sintético es incoloro, transparente y está compuesto por hidrocarburos alifáticos. Este disolvente para pinturas y barnices sintéticos regula la viscosidad de pinturas o barnices. Para esta última tarea, las medidas aconsejables que se deben añadir a la pintura oscilan entre el 5 % al 10 % del total.
✅ Aceite de linaza
La principal utilidad de este producto es reducir la consistencia de la pintura, a la vez que aumenta su fluidez y difumina la pincelada. También sirve para ligar las pinturas oleosas. Y se utiliza como enriquecedor y abrillantador de ladrillos, baldosas de terracota y otros materiales porosos.
Es un producto natural, que se extrae de la linaza, la semilla de la planta del lino. Y además de resultar útil como disolvente, tiene diversas aplicaciones en la industria cosmética y en la fabricación del linóleo.
✅ ¿Con qué materiales funciona cada disolvente?
¿Cuál es el mejor disolvente para cada material? El uso de uno u otro disolvente no está tan relacionado con el material sino con el tipo de pintura. Así, para pintura acrílica el mejor diluyente es el agua, y para los barnices será más adecuado el aguarrás, etc.
Sin embargo, sí hay pinturas más adecuadas para cada material :
- Madera: las más adecuadas son la acrílica para maderas de interior y las de látex para las maderas de exterior. En ambos casos, el disolvente es agua.
- Metal: existen pinturas específicas para hierro y otros metales, que protegen frente a la oxidación.
- Azulejos: las idóneas son pinturas epoxi o acrílica para baldosas, que se diluyen con agua.
¿Y qué disolvente usar para retirar la pintura de la madera o el metal? Para quitar la pintura, además de los ya citados (acetona, aguarrás…) se pueden usar decapantes químicos. Son geles que incluyen distintos tipos de disolventes que ablandan la pintura y permiten retirarla con facilidad. Los hay específicos para la madera, para el metal, o para retirar pintura de azulejos.
Todos estos disolventes son muy útiles cuando se afronta un trabajo de pintura, tanto durante la tarea como al final, cuando hay que limpiar las herramientas.
A esta última etapa del trabajo a veces no se le presta la suficiente atención, y eso que es un paso fundamental, ya que de ello dependerá el estado de los rodillos, pinceles, brochas y demás utensilios cuando tengan que volver a emplearse.
