Probablemente en más de una ocasión se ha necesitado una toma de televisión en un punto de la casa donde no existía. En los casos en los que esto sea así y como solución temporal o para un periodo corto se puede hacer una antena de una manera simple, teniendo en cuenta que la señal ha de llegar con cierta potencia, es decir, que no en todas las situaciones se va a poder sustituir una antena activa (con enchufe) por una pasiva (la típica de cuernos sin enchufe) .
La solución está en hacerse con cable coaxial de cierta longitud, (a ser posible más de un metro) y pelar el extremo que no se conecta a la televisión, dejando el núcleo saliente al menos dos centímetro y la maya pelada otros dos centímetros.
Ahora sólo dependerá de la habilidad de cada uno para ponerla en la posición que mejor recoja las ondas de televisión.