Con horno, de acero, de hierro fundido o de material refractario. Modernas o clásicas. Los distintos modelos de estufas suponen una amplia variedad de estilos y posibilidades decorativas. Además, no precisan de engorrosas obras para su instalación, sino que basta con conectarlas a un conducto de evacuación de humos. Aportan un buen rendimiento calorífico, ya que emiten calor por radiación y convección a través de sus paredes, y son decorativas. Otra ventaja es su combustión, que se realiza a través de la quema de leña, derivados de la madera o bioalcohol, combustibles respetuosos con el medio ambiente.
Distintos materiales para una misma función
Las estufas más versátiles disponen de un horno en la parte superior. Estos emisores de calor se fabrican en hierro fundido y acero inoxidable. Una opción más sencilla y ligera son las estufas de acero, con un doble fondo cuyo interior es del mismo material.
Las fabricadas en material refractario tienen la ventaja de alcanzar temperaturas muy altas, ya que pueden acumular y emitir una gran cantidad de calor. Además, su combustión es más limpia.
Por su parte, las de hierro fundido son muy eficaces en la acumulación y emisión de calor. Otra de sus ventajas es ser las más resistentes y duraderas.
Combustibles alternativos a la leña
Las estufas de pellets o que utilizan el bioalcohol como combustible son opciones limpias y ecológicas para calentar una vivienda. A diferencia de las alimentadas con leña, no precisan de gran espacio para almacenaje.
Las estufas de bioalcohol son portátiles y no necesitan salida de humos
Las estufas de bioalcohol son portátiles y no necesitan salida de humos. Se instalan y desinstalan de forma rápida y sencilla. El bioalcohol procede de productos biodegradables, por lo que su combustión es respetuosa con el medio ambiente. Otro aspecto a su favor es el rendimiento, mayor cuanto menos cantidad de combustible se emplea.
Respecto a los pellets, este tipo de estufas alcanzan un rendimiento calorífico superior al 85%. Su autonomía es bastante larga, ya que pueden funcionar hasta 48 horas sin necesidad de añadir más combustible.
Los pellets son pequeños cilindros aglomerados de serrín procedentes de las labores de limpieza de bosques e industrias madereras, cuya combustión origina un reducido nivel de emisiones de CO2 a la atmósfera.
Para un óptimo rendimiento deben ser de calidad. De lo contrario, la estufa se ensucia en exceso y se atasca. La calidad se reconoce por su color y el estado de la pieza. Deben ser brillantes, lisos, con una longitud uniforme y carecer de polvo.
El principal requisito para instalar una estufa es localizar la ubicación apropiada para la salida de humos. Una vez decicida, habrá que organizar el espacio, que debe carecer de problemas ante la emisión de calor. Hay que respetar las indicaciones del fabricante en cuanto a las distancias que se deben mantener entre la estufa, los tabiques o paredes próximas y demás elementos inflamables. En caso necesario, se puede recurrir al aislamiento térmico de los muros.