Si se tiene algún sanitario, fregadero u otro sistema con desagüe en el jardín o en el exterior de la vivienda, es posible que los sifones que no estén aislados, se congelen por las bajas temperaturas. En estos casos es recomendable echar sal gruesa por los desagües de los sanitarios, evitando así que el agua de los sifones se congele.
Sazonando de esta manera las tuberías se logra otro efecto al margen del propio de anticongelación, el de eliminar los malos olores que se producen como consecuencia de todo estancamiento.
Así que con la llegada de las primeras heladas del invierno es recomendable salar bien todos los sifones, especialmente los expuestos a la intemperie.