La instalación eléctrica del hogar soporta cada día la actividad de numerosos aparatos. Algunos se utilizan prácticamente a diario y de manera simultánea. Por ello, para no sobrecargar la red, cada instalación cuenta con interruptores magnetotérmicos o PIA (Pequeño Interruptor Automático).
Estos dispositivos protegen contra sobrecargas y cortocircuitos. Sustituyen a los tradicionales fusibles y cumplen, por lo tanto, la misma función que estos. Son, en esencia, limitadores de intensidad que interrumpen la corriente eléctrica cuando se conectan demasiados aparatos a la vez y se sobrepasan unos valores máximos o cuando se produce un cortocircuito.
Funcionamiento
Los interruptores magnetotérmicos se localizan en el cuadro de distribución general, donde se instala un PIA por circuito para proteger tanto los aparatos eléctricos como los cables. La intensidad que cada interruptor es capaz de soportar está en función de la sección de los conductores.
La intensidad que soportan está en función de la sección de los conductores
Cada magnetotérmico cuenta con dos bornes de entrada (en la parte superior) y salida (en la parte inferior), para los conductores fase (azul) y neutro (marrón, gris o negro). La causa de que se disparen y corten el suministro radica en que la intensidad de corriente que soporta la fase es superior a la prevista. Cuando esto ocurre, se cortan a la vez la fase y el neutro, por lo que la vivienda queda sin suministro.
Para disponer de nuevo de corriente eléctrica, es necesario subir el pulsador de que dispone cada PIA. Se distingue porque se localiza en el centro del dispositivo, en color negro.
Puesto que los fusibles cumplen la misma función que los PIA, se pueden sustituir por estos. Existen cuadros de distribución prefabricados para colocar los nuevos magnetotérmicos. No obstante, se trata de un trabajo que requiere ciertos conocimientos, por lo que es recomendable solicitar los servicios de un profesional.
Concluidos los trabajos de sustitución, en el cuadro de distribución tan sólo quedan a la vista los pulsadores. El resto de la instalación está protegida por una tapa accesible, que facilita la manipulación pero evita que los conductores de fase y neutro queden expuestos.
