El mueble que se puede apreciar en la fotografía es de tonalidad oscura, lo que le hace contrastar con la tonalidad blanca con la que se ha pintado la pared. A pesar de ser negro, tiene un acabado llamativo, que unido a los paneles de metal dorado que cubren los bordes de su espejo y a las puertas y cajones situados en la parte inferior del mismo otorgan al mueble un aspecto brillante.
El espejo de grandes dimensiones consigue ampliar visualmente la estancia y nos permite utilizar el menaje como vestidor, para comprobar que todas las prendas se encuentran en su sitio antes de salir de casa.
El mueble tiene una pequeña repisa sobre la que podemos colocar las llaves de la vivienda cuando entremos en casa. Sobre esta repisa se han colocado elementos decorativos como un jarrón con flores artificiales y unos ceniceros.
A ambos lados del espejo están situadas dos pequeñas lámparas con mampara que se encienden cuando abrimos la puerta de la vivienda.
Una buena opción para aprovechar el mueble de la parte inferior es adaptarlo como si de un zapatero se tratara, para poder guardar nuestro calzado en el interior. En este enlace encontrará información sobre como reconvertir el mueble en zapatero.