A la hora de pintar una vivienda, sobre todo si no estamos acostumbrados a realizar la tarea, resulta necesario proteger el suelo para evitar mancharlo, sobre todo si es de madera, porque en el caso de ser cerámico podremos retirar la pintura con mayor facilidad.
Normalmente, con el objetivo de ahorrar costes, quienes deciden pintar su propia casa suelen emplear simplemente papel de periódico para este fin. Pero para poder forrar el suelo con mayor comodidad es mejor emplear el papel kraft o de estraza.
Este papel suele utilizarse mucho para embalar objetos o envíos postales y, a pesar de su aparente fragilidad, puede servirnos para cumplir nuestro objetivo por un módico precio. Si adquirimos un rollo bastante ancho podremos forrar el suelo al completo de manera precisa y rápida, desenrollándolo y asegurando las uniones entre los diferentes pliegos con cinta aislante o de carrocero.
Una vez hayamos terminado de pintar podremos retirarlo fácilmente sin manchar. Si hemos fijado adecuadamente el papel, la tarea será sencilla y evitaremos los problemas que suele dar el papel de periódico, que termina moviéndose, o el plástico, que puede llegar a plegarse, dejando lugares al descubierto.