La escalera que se puede apreciar en la fotografía se encuentra a la intemperie, por lo que la madera de su pasamanos, su parte inferior es metálica, se ha deteriorado debido a las inclemencias climatológicas. Si queremos restaurarla, lo primero que debemos hacer es lijarla, para dejar al descubierto la madera y poder apreciar si alguna parte presenta otros desperfectos.
De ser así, podremos repararlos adquiriendo pasta de madera o bien con una mezcla de cola y serrín. Una vez se haya reparado el pasamanos se podrá decorar como se desee, aplicándole previamente una mano de tapaporos, para que la madera no chupe en exceso el producto decorativo, ya sea pintura o barniz.
Para proteger la madera frente a la humedad es recomendable aplicarle dos manos de selladora sintética y lijarla con una lija de papel abrasivo al agua. Para conseguir el tono y la impermeabilidad final, habrá que extender tres manos de esmalte laca con un rodillo o una brocha de esmaltar.
Si fuera necesario restaurar también la parte inferior, que en este caso y en otros muchos es de metal, habría que lijar éste para retirar la pintura o los restos de oxidación y luego volver a repintar la superficie. También se puede decapar la pintura con un producto especial para metales o bien retirarla aplicando calor con una pistola de aire caliente, retirando las partes levantadas con una espátula.
Otra solución más sencilla consiste en emplear un producto que permita pintar directamente sobre el metal oxidado. Se puede consultar más información al respecto a través del presente enlace y si lo que se desea es dotar de un aspecto antiguo a la parte metálica en estas mismas páginas puede encontrar consejos.
