Préstamos de fácil acceso
Cada vez las personas se acostumbran más a pedir préstamos a golpe de clic. Hacerlo resulta tan fácil y sencillo que en muchas ocasiones ni siquiera se dan cuenta.
Según los especialistas, antes, para pedir un préstamo había que acudir a un banco y demostrar que se tenía cierta solvencia económica. Ahora, muchas veces es el propio banco el que envía una notificación donde informa que se tiene un crédito preaprobado; incluso la app de la entidad propone financiar compras; o bien los mismos portales comerciales permiten pagar a plazos.
Tener acceso al crédito así de simple no quiere decir que convenga pedirlo. Si el préstamo genera intereses o tiene un coste extra y la persona ni siquiera sabe si puede hacer frente a eso, el resultado será, muy probablemente, terrible. Es aquí cuando muchos se desesperan, porque no saben cómo salir de las deudas. De hecho, a veces ni siquiera saben en qué momento adquirieron tantos compromisos financieros.
Qué debes saber antes de pedir un préstamo
Los expertos han elaborado un listado con las cosas que se deben tener presentes antes de pedir o aceptar cualquier préstamo:
1. Deuda buena y deuda mala: ¿en qué se diferencian?
- La deuda buena es la que sirve para comprar algo que realmente se necesita —que no es un capricho— y que no se puede pagar solo con ahorros. Por ejemplo, hacer una reforma del hogar para mejorar algo. O bien, para generar más ingresos en el futuro, como sería comprar una moto si se necesita para trabajar.
- La deuda mala, sin embargo, se adquiere solo para pagar caprichos o compras compulsivas o para comprar objetos o bienes que la persona no se puede permitir. Si una persona tiene un ingreso mínimo, por ejemplo, no debería pedir dinero prestado para financiar la compra de un smartphone de última generación.
2. Ten claro cuánto te costará contraer la deuda
Por lo general, pedir un préstamos conlleva pagar intereses. La entidad financiera que concede el préstamo cobra una cantidad por adelantar ese dinero que se necesita. Entre los gastos incluidos dentro de un crédito están los siguientes:
- El tipo de interés: el interés nominal (TIN) es el beneficio que saca quien presta dinero por conceder el crédito. Se calcula aplicando un porcentaje sobre el importe de la deuda.
- Las comisiones: muchas financieras también cobrarán cargos aparte por tramitar ciertas gestiones.
- Los gastos de vinculación: es posible que haya que contratar productos adicionales para acceder al préstamo, como seguros.
Todos estos gastos se reflejan en la llamada tasa anual equivalente o TAE. Si se quiere saber cuánto costará un préstamo, se debe prestar atención a la TAE. Cuanto más baja sea, menos dinero costará devolver una deuda.
3. ¿Puedes pagar la deuda?
Jamás se debe dedicar más del 35 % del sueldo mensual neto a pagar las cuotas de todas las deudas. Además, solo se tendría que pedir prestado si se tiene un trabajo o ingresos estables.
4. ¡Compara!
Los coaches financieros recomiendan comparar toda la oferta que haya en el mercado. Así se podrá optar por el préstamo que mejores condiciones tenga, y eso significa ahorrar dinero.
5. Organiza bien tus finanzas
Antes de pedir dinero prestado se debe tener control sobre las finanzas. Saber cuánto se ingresa y egresa al mes es elemental para poder saber si una persona se puede o no permitir un préstamo. Si vas a contraer una deuda, deberías tener un presupuesto mensual y las finanzas en orden. Eso te ayudará a evitar caer en impagos y estrés.