La cotización del petróleo ha alcanzado esta semana sus niveles más altos del año. Incluso ha habido momentos en que llegó a rozar los 30 dólares el barril, precio que no registraba desde hace dos años. Lógicamente, los productos derivados del petróleo, como los combustibles, no han sido ajenos al encarecimiento de su materia prima. Sólo en la última semana, los precios de las gasolinas y del gasóleo en España han subido una media de 0,005 euros (0,83 pesetas) por litro. A lo largo de este mes, la subida acumulada es de unos 0,020 euros (3,32 pesetas) por litro.
En estos momentos, el precio medio de la gasolina sin plomo de 95 octanos, la de mayor consumo en nuestro país, es de 0,837 euros (139,66 pesetas) el litro. La horquilla de precios en la Península y Baleares, según los datos que recoge el Ministerio de Economía, de esta gasolina es de 0,760-0,899 euros. Eso quiere decir que en Gerona, única provincia donde alguna estación de servicio vende la gasolina de 95 octanos a 0,899 euros, se ha superado el récord histórico, que estaba en 0,877 euros.
La sin plomo de 98 octanos también se haya en su nivel más alto, con un precio medio de 0,919 euros (152,9 pesetas) el litro. El precio medio de la nueva súper es de 0,897 euros (149,24 pesetas). En cuanto al gasóleo, su precio medio en la Península y Baleares es de 0,717 euros (119,29 pesetas) el litro, lo que supone el máximo anual.
Si comparamos los precios actuales con los que había al comenzar el año, vemos que las gasolinas se han encarecido una media de 0,126 euros (21 pesetas) por litro. La de 95 octanos es ahora unos 0,116 euros (19,30 pesetas) más cara; la de 98 octanos, 0,136 euros (22,62 pesetas), y la nueva súper, 0,128 euros (21,29 pesetas). El precio del gasóleo de automoción ha aumentado también desde el 1 de enero. En este caso, la subida ha sido inferior a la de las gasolinas. El gasóleo es 0,068 euros (11,31 pesetas) más caro.
Si comparamos la evolución de la cotización del petróleo durante este año y los precios de las gasolinas y del gasóleo, observamos que mientras el crudo se ha encarecido un 38% -ha pasado de 21 a 29 dólares el barril-, las gasolinas han subido una media del 16% y el gasóleo un 10,4%. Con un simple ejemplo podemos ilustrar mejor estas subidas. Si con 30 euros echábamos 40,9 litros de sin plomo de 95 octanos a primeros de enero, hoy, con los mismos 30 euros, sólo echaremos 35,3 litros; es decir, 5,6 litros menos.
Repercusión en el IPC
El incremento de los precios de los combustibles durante el mes de septiembre volverá a repercutir muy negativamente en el Índice de Precios al Consumo (IPC) de este mes, como ya ocurrió en agosto. Entonces, los precios subieron tres décimas, siendo los carburantes y combustibles, con un 0,5%, uno de los grupos que más contribuyeron al aumento del IPC.
Además, el panorama no es muy halagüeño, ya que la cotización del petróleo Brent sigue sobre los 29 dólares el barril. Aunque los últimos días de la semana ha registrado un leve descenso, los expertos auguran que los precios mantendrán su actual nivel mientras no se resuelva el conflicto entre Estados Unidos e Irak, que está gravando entre 2 y 3 dólares el precio del barril.
La semana pasada, el precio de la cesta de crudos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) siguió al alza, superando el límite de la banda de fluctuación prevista de 28 dólares. Hay que recordar que en caso de que el precio continúe por encima de los 28 dólares durante 20 días laborables seguidos, el cártel debería aumentar su producción diaria en medio millón de barriles, que es de 21,7 millones.
El precio medio del barril de la cesta OPEP había superado por última vez la marca de los 28 dólares a principios de diciembre de 2000. La subida del crudo y de sus derivados frenará la ligera recuperación de las economías más desarrolladas.
