El absentismo laboral en España ha pasado del 3% al 12% en los últimos cuatro años y se ha convertido en uno de los principales problemas de las empresas, cuyos responsables denuncian que la falta frecuente de asistencia del trabajador a su centro de empleo es cada vez más habitual.
La situación figura en un informe de la multinacional de trabajo temporal Adecco, que asegura que, en la mayor parte de los casos, el absentismo es «injustificado». A su juicio, la falta de motivación y la insatisfacción laboral se encuentran detrás de muchas ausencias reiteradas al trabajo.
El estudio indica que «está en manos de las propias empresas el desarrollar técnicas para anticiparse al absentismo o combatirlo cuando ya es una realidad». Así, los expertos laborales recomiendan a los empresarios tener en cuenta los aspectos personales de los trabajadores en relación con el desempeño de su actividad y cuidar la retribución, la actuación de los mandos, el ambiente entre los compañeros, el tipo de tareas a desarrollar, la sensación de estabilidad y las oportunidades de progreso.
Igualmente, los autores del informe consideran que organizar actividades lúdicas con los empleados fuera de la empresa es «una oportunidad de oro» para potenciar la cohesión del grupo, sobre todo entre mandos y subordinados, e incrementar la satisfacción de todos. Además, se muestran partidarios de programas de retribución por competencia, porque «si se premia al trabajador por su éxito en la realización de su tarea se consigue aumentar su implicación, iniciativa y creatividad».
Síndrome posvacacional
El estudio sitúa dentro de las causas externas al individuo, provocadoras de la ausencia, el síndrome posvacacional. En este sentido, indica que la vuelta a la rutina requiere un periodo de adaptación y es frecuente que aparezcan síntomas de desequilibrio físico y emocional.
Los autores añaden que el absentismo es más acuciante en las empresas con más de 1.000 empelados porque los trabajadores tienen difícil sentirse implicados dentro de la organización.
Y en cuanto a la actividad y sectores, las tareas administrativas figuran en primer lugar, debido al alto grado de trámites burocráticos que engloban.