La deuda de los hogares aumentó el 25% el pasado año, hasta 113.328 millones de euros, por la expansión de la inversión de las familias, que compraron viviendas y otros activos físicos por importe de 81.954 millones, pero también activos financieros (acciones, participaciones, seguros, fondos de inversión y de pensiones) por un total de 94.423 millones de euros, según un informe de Caixa Catalunya.
Los ingresos familiares avanzaron a menor ritmo que los gastos, de manera que el ahorro apenas creció el pasado año el 1,7%. Su valor total, 60.926 millones de euros, resultó insuficiente para financiar la inversión, de ahí la escalada del endeudamiento.
Las deudas de los hogares alcanzaron el año pasado el 16,8% de su renta disponible
El endeudamiento de las familias españolas alcanzó el 16,8% de su renta disponible, según los datos de Caixa de Catalunya.
La entidad catalana explicó que la tendencia a la reducción de la tasa de ahorro junto con la fuerte inversión en activos físicos y financieros explica el creciente endeudamiento por parte de los hogares.
Activos financieros
El estudio confirma la preferencia de las familias españolas por la inversión en activos financieros, que en 2005 fue equivalente al 155% del ahorro, por encima del 135,7% de 2004 y el 114,2% del año anterior.
Según Caixa Catalunya, las familias se inclinaron el pasado año por invertir sobre todo en activos líquidos (que se convierten con facilidad en dinero), dejando de lado las operaciones de riesgo. Efectivo y depósitos, con 54.594 millones de euros, representaron el 57,8% del total de colocaciones de 2005, cinco puntos más que en el ejercicio anterior.
En acciones y otras participaciones invirtieron los hogares 18.325 millones de euros, el 19,4% del total frente al 20,6% del año precedente.
La inversión en activos físicos, principalmente en vivienda o la efectuada por los empresarios individuales en sus negocios, pasó a representar un 12,2% de la renta familiar disponible y creció un 14,1%, una cifra muy por encima del aumento del ahorro.
El valor de los nuevos activos adquiridos por los hogares se situó en el 26,2% de la renta familiar disponible, por encima del 24,9% de 2004 y del 21,4% de 2000.
