La experiencia empresarial de los fundadores, el tamaño de la empresa y la participación de mujeres son los factores clave para lograr la supervivencia y consolidación de una nueva empresa.
Así se desprende del informe «Factores para consolidar una empresa» elaborado por las cámaras de comercio, en colaboración con el Fondo Social Europeo, a partir del análisis de las sociedades creadas en 1998 y que en 2002 aún subsistían.
Nueve son en total los elementos que, en virtud del estudio, determinan el futuro de una empresa, entre los que, además de los ya citados, destacan la existencia de un socio mayoritario, la motivación de los fundadores, su juventud, el acceso a recursos ajenos y subvenciones, y la ubicación en municipios de más de 50.000 habitantes.
La importancia de la experiencia empresarial previa se demuestra en el hecho de que, según el informe, los fundadores del 63 por ciento de las empresas analizadas contaban con un sólido bagaje.
El estudio indica también que el 36 por ciento de las empresas consolidadas en los últimos años contaron con al menos una mujer en su proceso de creación.
A pesar de ello, las cámaras reconocen que la motivación por la creación de empresas es aún mayor en los hombres que, según sus datos, están detrás del 66% de los nuevos negocios puestos en marcha en el periodo 1998-2002.
La juventud y la motivación constituyen otros dos importantes pilares de una empresa ya que, según el estudio, una nueva sociedad cuenta con menores posibilidades de sobrevivir si sólo se crea para salir de una situación de desempleo. Asimismo, el informe revela que los gestores del 44% de las empresas surgidas y consolidadas en los últimos años contaba con edades comprendidas entre los 30 y 39 años.
Por último, el estudio subraya la importancia de optimizar la gestión de los recursos con que cuenta la empresa, señalando la innovación y los recursos humanos como los ejes estratégicos de una buena administración.
