El Gobierno quiere que el 60% de los consumidores de electricidad dependan del mercado libre

De esta forma la tarifa de la luz en España se situaría por debajo de la media de la UE
Por EROSKI Consumer 21 de marzo de 2007

El Gobierno pretende que seis de cada diez consumidores de electricidad dependan del mercado liberalizado al cierre de 2008, tras alcanzar este año el objetivo de que el 50% de las compras de esta energía se tramiten por esa vía. El ministro de Industria, Joan Clos, destacó que con ello se conseguirá que la tarifa de la luz en España se sitúe por debajo de la media de la Unión Europea (UE).

No obstante, adelantó que de no lograrlo en primera instancia, «haremos los decretos que sean necesarios» para garantizar un precio moderado de la electricidad. A su juicio, esto ya se produce ahora gracias al déficit tarifario (diferencia entre los precios regulados y el coste que tienen las empresas) que acumulan las compañías del sector y que ha de pagarse hasta 2020, pero recordó que los cambios que el Ejecutivo persigue en el modelo vigente obligarán a adoptar otro tipo de actuaciones favorables al consumidor.

Respecto a la energía nuclear, Clos se limitó a decir que todo podría quedar en que no haya nuevas centrales, aunque se cierren las más antiguas de las existentes hoy. En cuanto al controvertido decreto que revisa las primas por producir energías renovables, muy criticado por el sector, adelantó que podría ser aprobado por el Consejo de Ministros en mayo.

Gas

El precio del gas es otro asunto que preocupa al Ejecutivo. Al respecto, Joan Clos ha dicho hoy que la posible subida de las tarifas del gas natural procedente de Argelia será «moderada» y ha avanzado que estas bajarán probablemente a partir del 1 de abril teniendo en cuenta los precios internacionales.

Durante la sesión de control al Gobierno en el Senado, el ministro ha señalado que en estos momentos es «muy difícil» calcular el impacto en las tarifas de un eventual encarecimiento del gas que entra en España a través del gasoducto del Magreb, porque esta cuestión se está negociando en la actualidad entre Gas Natural y la compañía argelina Sonatrach.

No obstante, ha precisado que su posible efecto será «moderado», puesto que el peso del gas argelino en el abastecimiento del mercado español se ha reducido en los últimos años por la puesta en marcha de nuevas plantas de regasificación y la firma de contratos de suministro con otros países.

El titular de Industria ha destacado también que los precios actuales del gas natural en los mercados internacionales son bajos, lo que proporciona un «margen de resistencia favorable» y permite pronosticar que no habrá subidas inmediatas.

En este sentido, ha asegurado que los precios de esta energía probablemente bajarán en la próxima revisión, que debe entrar en vigor el 1 de abril, tal como ha ocurrido ya con el butano y los gases licuados del petróleo (GLP) por canalización.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube