El Producto Interior Bruto (PIB) generado por la economía española cayó un 4,1% en el segundo trimestre del año, con respecto al mismo periodo de 2008. La variación intertrimestral se situó, por su parte, en el -1%, según el avance de la Contabilidad Nacional Trimestral del Instituto Nacional de Estadística (INE). Estas dos cifras superan las previstas por el Banco de España el pasado 30 de julio, que indicaba una caída interanual del 4% y un descenso intertrimestral del 0,9%.
El INE señala que, al igual que en los trimestres anteriores, la contracción del nivel del PIB es consecuencia de una contribución más negativa de la demanda nacional, que se vio compensada en parte por una aportación positiva del sector exterior.
Con el segundo trimestre de 2009, ya son cuatro los trimestres consecutivos en los que se contrae el PIB español, sin embargo, la variación intertrimestral del indicador es menos negativa que en el trimestre precedente (-1%), lo que indica una moderación en la caída del PIB.
Los datos del PIB español contrastan con los publicados ayer por Alemania y Francia. Ambos países anunciaron la vuelta a la senda del crecimiento económico, con tasas de aumento del Producto Interior Bruto del 0,3% en el segundo trimestre respecto al primero. Esta mejoría de dos de los dos principales ‘motores’ económicos de la zona euro, alienta la esperanza de una recuperación en el conjunto de la zona euro, cuyo Producto Interior Bruto (PIB) sólo retrocedió un 0,1% en ese periodo, frente a la caída del 2,5% que registró entre enero y marzo.
Las cifras difundidas ayer por Eurostat coincidieron con la publicación del boletín mensual de agosto del Banco Central Europeo (BCE), en el que instituto emisor proclama que lo peor ya ha pasado. «La recesión global ha tocado fondo» y en la zona euro «el ritmo de contracción se ralentiza claramente». Sin embargo, advirtió que la actividad económica continuará siendo débil durante el resto de 2009.