La fidelidad, el respeto mutuo, la comprensión y la tolerancia son, a juicio de los españoles, los factores esenciales para el éxito del matrimonio. Así figura en el estudio «España 2000, entre el localismo y la globalidad», dirigido por los sociólogos Francisco Andrés Orizo y Javier Elzo y editado por la Fundación Santa María y la Universidad de Deusto. Otra conclusión del informe es que el número de ciudadanos que creen que el matrimonio como institución está pasado de moda ha descendido del 23 al 16% a lo largo de las dos últimas décadas.
El trabajo recoge los resultados de la aplicación de la Encuesta Europea de Valores desde 1981 a 1999, lo que permite constatar la evolución de la opinión pública respecto de aspectos básicos de la vida social de un país, tales como la religión, el trabajo, la familia, la política o la propia escala de valores de los ciudadanos.
El artículo relativo a la familia, elaborado por la catedrática de la Universidad de Deusto Carmen Valdivia, recoge los enormes cambios sufridos desde los tiempos de la transición política. Cambios que, sin embargo, han servido para consolidar la institución, como demuestra el menor número de ciudadanos que la consideran algo pasado de moda. Otro asunto es que esa institución, en la que los españoles confían más que la media de la Unión Europea, sufre un proceso de cambio muy intenso.
«Es algo interno, que afecta sobre todo a la redistribución de roles entre los miembros de la pareja», comenta Javier Elzo, catedrático de Sociología de Deusto, quien destaca la aceleración de un proceso que aquí comenzó en los años sesenta-setenta, cuando en otros países, como Francia, se había iniciado con el arranque del siglo XX.