Cómo nos afecta un euro caro

El euro ha subido un 7,5% en lo que va de año y ya se intercambia por 1,42 dólares, su nivel máximo histórico, lo que puede provocar que se resientan la economía, el consumo y el ahorro
Por Gracia Terrón 12 de octubre de 2007

El euro sigue dando muestras de su supremacía frente al dólar. En los últimos días, la moneda única no hace más que encadenar un nuevo máximo histórico tras otro. Desde que la Reserva Federal decretara una bajada del precio del dinero en Estados Unidos (desde el 5,25% hasta el 4,75%), el euro no ha dejado de subir. En la actualidad, se intercambia por 1,42 dólares, y en lo que va de año la divisa europea se ha apreciado un 7,5% respecto al dólar. Ahora, lejos de pensar que tener una moneda fuerte es positivo para la economía, son varias las instituciones que han mostrado su preocupación por tener un euro en tan alto nivel, como es el caso de la Comisión Europea. Si llegara a 1,50 dólares, algunos expertos estiman que podría comenzar a resentirse la economía de Euopa a nivel global y la española, en particular. ¿Cuáles son, por tanto, los efectos de tener un euro caro? Como las monedas, la situación actual presenta una cara y una cruz y debe analizarse desde los dos puntos de vista: es posible encontrar efectos negativos, pero también positivos de la subida del euro que afectan a la economía, el consumo y el ahorro.

Por qué sube el euro

Por qué sube el euro

En la actualidad, la subida del euro se corresponde más con la debilidad de la economía estadounidense que con una fortaleza real de la europea. El fuerte déficit comercial de Estados Unidos, la crisis de las hipotecas de alto riesgo, y la bajada de los tipos de interés en aquel mercado han hecho que las inversiones en dólares pierdan interés. José Luis Martínez, estratega de Citi en España, afirma que el principal motivo que explica la actual escalada del euro se encuentra en el descenso de los tipos de interés americanos que decretó la Reserva Federal el pasado 18 de septiembre, actuación en materia de política monetaria que no se ha interpretado en el mercado como una decisión puntual. Algunos expertos estiman que la Fed americana podría anunciar una nueva bajada de tipos, hasta situarlos en el 4,5%, con el fin de intentar reactivar la economía estadounidense y de evitar que entre en recesión por culpa de la crisis de crédito que vive actualmente.

`

Algunos expertos estiman que la Fed americana podría anunciar una nueva bajada de tipos, hasta situarlos en el 4,5%

Con esta posibilidad en mente, son numerosas las casas de análisis que creen que el euro seguirá fuerte en los próximos meses. Numerosos analistas estiman que a finales de año la divisa europea se cambiará en torno a 1,40-1,45 dólares, y que en 2008 el cambio podría alcanzar los 1,50 dólares. El dólar se deprecia y muy probablemente seguirá depreciándose durante los próximos meses, según afirma el último informe de Estrategia de Bankinter, en el que se añade que la crisis de crédito ha forzado a la Fed a iniciar un proceso de bajadas de tipos “de alcance limitado, pero suficiente como para acelerar la caída de la divisa americana”.

Impacto positivo de un euro al alza

  • Economía y empresas:

    El principal efecto positivo de tener un euro caro lo aprecian las compañías energéticas que importan el petróleo, ya que la factura de éste se paga en dólares. Empresas españolas como las petroleras Repsol o Cepsa, las energéticas como Unión Fenosa, Iberdrola o Endesa y aerolíneas como Iberia, que importan petróleo de fuera ven reducidas sus facturas a la hora de pagar los barriles de petróleo que utilizan para luego producir sus distintos artículos (convertirlos en carburantes, usarlos como combustible…). Mantener saneados los balances de estas grandes empresas es siempre positivo para la economía española, sobre todo porque se trata de compañías que operan en segmentos estratégicos. Su buen estado de salud confirma que los consumidores podrán acceder sin problemas a sus distintos servicios: luz, comprar gasolina, viajar…

  • Ahorro e inversión:

    El movimiento de las divisas también tiene un impacto directo sobre el ahorro de los inversores. Desde el punto de vista de la inversión, con un euro en trayectoria alcista ganan interés los instrumentos referenciados a esta divisa y los pierden, por tanto, los que están referenciados al dólar. La rentabilidad de las inversiones realizadas en Estados Unidos depende en parte de la cotización del dólar. En la actualidad, por ejemplo, los fondos de inversión que apuestan por el mercado americano están reduciendo su rentabilidad final, debido a la debilidad del dólar. Por el contrario, ganan atractivo los fondos de inversión que invierten en euros.

  • Un euro caro propicia un menor endurecimiento de los tipos de interés, lo que dará mayor estabilidad al euribor

  • Consumo:

    La subida del euro puede aprovecharse, por ejemplo, para viajar a países cuya moneda principal es el dólar, por ejemplo Estados Unidos. La caída de la divisa estadounidense hace que las estancias en aquel país sean ahora más baratas a como lo podían ser, por ejemplo, hace un año. Con la inflación controlada en Estados Unidos, los precios turísticos más o menos se han mantenido, mientras que la subida del euro hace que unas vacaciones en Nueva York o Washington resulten ahora en torno a un 5% más baratas que hace un año.

  • Economía:

    Paradójicamente, un efecto positivo que puede desprenderse de la actual subida del euro está en la influencia para no subir los tipos de interés que genera sobre el Banco Central Europeo. Con un euro caro, la economía europea necesita una política monetaria más laxa y no un endurecimiento de los tipos de interés. Esto ya se está reflejando en una mayor estabilidad para el euríbor, índice al que están referenciadas las hipotecas. Si el BCE no sube tipos, teniendo en cuenta la fuerte subida del euro y otros muchos factores, los préstamos hipotecarios dejarán de encarecerse o, al menos, ya no lo harán al ritmo de los últimos meses.

Otro efecto que puede anticiparse de la situación actual que viven el euro y el dólar hay que buscarlo en la influencia que genera la Reserva Federal sobre el Banco Central Europeo. Si allí siguen bajando los tipos de interés, más pronto que tarde la institución europea seguirá este mismo camino. Esta medida la agradecerían, sobre todo, los miles de hipotecados españoles, ya que una bajada de los tipos de interés se refleja directamente en forma de abaratamiento de los préstamos.

Impacto negativo de un euro caro

  • Consumo:

    A nivel doméstico, tener un euro caro tiene consecuencias negativas para los turistas estadounidenses que vienen a visitarnos, ya que les costará más su estancia. En agosto, sólo un 1,8% de los turistas internacionales que recibió España procedieron de Estados Unidos, frente al 26,6% de ingleses, el 22% de franceses o el 14% de alemanes.

  • Economía:

    También los productos de nuestras empresas resultan menos competitivos en Estados Unidos, con lo que ciertas compañías perderían cuota de mercado en aquel país. Si el euro sigue encareciéndose, los estadounidenses preferirán comprar productos de otros mercados, como el chino o el japonés, donde el intercambio con su divisa no se ha depreciado tanto. Las exportaciones europeas podrían, por tanto, resentirse. En el caso español, un 17% de nuestras exportaciones se dirigen a Estados Unidos, porcentaje que podría disminuir. En cualquier caso, el grueso del comercio exterior español se realiza con países europeos, principalmente con Alemania, con lo que no se espera un fuerte impacto económico derivado de la subida del euro en este sentido.

  • Si el euro sigue encareciéndose Estados Unidos preferirá comprar en otros mercados y las exportaciones podrían disminuir

  • Inversión:

    En Bolsa, la subida del euro genera incertidumbre por cuanto pueda influir sobre el crecimiento económico. Históricamente se ha comprobado que en etapas de fuertes ascensos para la moneda única, la confianza inversora decae.

En definitiva, un euro caro afecta, sobre todo, a las empresas que basan gran parte de su crecimiento en el comercio con Estados Unidos. Desde Santander Investment estiman que entre el 20% y el 25% de los ingresos y los beneficios de las compañías del Viejo Continente se contabilizan en dólares. Si el euro sigue subiendo, una parte importante de los resultados que obtengan estas compañías podría evaporarse al realizar el cambio a euros. Así, una empresa que gane 100 millones de dólares, con el cambio a principios de año (cuando un euro valía 1,32 dólares) hubiera ganado 75 millones de euros. Ahora, con el tipo de cambio fijado en un euro igual a 1,42 dólares, sus ganancias se reducirían a 70 millones de euros.

En Europa se ven afectadas compañías automovilísticas que exportan en torno a un 50% de su producción a Estados Unidos, como es el caso de la alemana Daimler Chrysler (exporta un 53% a América, un 20% a Europa, un 7% a Asia). BMW o Volkswagen son otras de las empresas que pueden sufrir en bolsa y en su cuenta de resultados, por el ascenso del euro.

Sigue a Consumer en Instagram, X, Threads, Facebook, Linkedin o Youtube