Los créditos para realizar los cursos de doctorado permiten a sus solicitantes dotarse de entre 12.000 y 35.000 euros para asumir el coste total de los mismos, así como financiar los gastos originados por su obtención. El plazo de amortización oscila entre cuatro y diez años, y se aplican intereses fijos o variables, más comisiones del 1% por su apertura. Las entidades posibilitan a los doctorandos que procedan a su abono tras terminar el periodo de formación o acogerse a periodos de carencia en los que sólo se pagan los intereses.
Liquidez para afrontar el doctorado
Los programas de doctorado tienen, por lo general, una duración de dos cursos académicos. Durante este tiempo, el alumno debe superar un mínimo de créditos, que son el requisito previo para obtener el título de doctor en alguna disciplina universitaria. A ello hay que sumar, en numerosos casos, algunos años más para finalizar la tesis doctoral. Debido a su duración, es de suma importancia para los licenciados que quieren doctorarse obtener la liquidez suficiente para afrontar este proceso académico (material, libros, transporte, viajes de investigación, etc.).
Este tipo de créditos, a menudo, adelanta a los futuros doctores un importe máximo que oscila entre 12.000 y 35.000 euros, mientras que el plazo de devolución abarca entre cuatro y diez años, en función de cada oferta. Respecto a los tipos de interés que aplican las entidades financieras que los conceden, hay una gran variedad: pueden ser fijos (del 7%-9% de media) o variables, referenciados al Euribor más un diferencial. A ello hay que unir posibles comisiones. Por lo general, se cobra en torno a un 1% por la apertura del préstamo.
Los intereses pueden ser fijos (7%-9%) o variables, referenciados al Euribor más un diferencial
Los doctorandos pueden acogerse a un periodo de carencia en el que sólo se abonan los intereses del préstamo. Además, las entidades permiten a los estudiantes pagarlo una vez que hayan terminado estos años de formación.
Aunque escasas aún, cada vez hay más entidades financieras que confeccionan créditos específicos para esta finalidad, diferenciados de los destinados para otros tipos de estudios como carreras universitarias, másteres o estudios en el extranjero. Entre otras, destacan La Caixa, Caja Burgos, Caja España, Banco Sabadell, Cajamar y Caja Canarias.
La opción de las becas
Los licenciados, arquitectos o ingenieros que vayan a realizar su doctorado no sólo pueden solicitar este tipo de créditos personales específicos. También pueden obtener financiación a través de diversas becas para cursar los programas de doctorado. La convocatoria general más importante la ofrecen desde hace varios años el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas.
Aparte de estas convocatorias generales, hay ayudas suplementarias, bien de las propias universidades o de instituciones públicas y privadas. Los interesados pueden obtener la información necesaria para acceder a estas becas a través de los organizadores del programa de doctorado, de las comisiones de doctorado o en los vicerrectorados de investigación.
Los becarios Erasmus, Sócrates o Leonardo son los principales destinatarios de los créditos para financiar estudios en el extranjero. Son un complemento a la ayuda que conceden estos programas, no muy cuantiosa. Pero estos préstamos están abiertos a cualquier tipo de estancia por estudios fuera de la ciudad de residencia habitual del solicitante.
El importe que se anticipa es el necesario para cubrir los estudios, la estancia, los traslados, la manutención, el material, etc. Para acceder a esta financiación es necesario aportar beca, matrícula o documento análogo del centro de destino.
