La crisis económica supeditada a la pandemia ha dejado cambios sustanciales en el sector de la financiación. El miedo la morosidad y la inestabilidad económica de muchos clientes ha dejado a los bancos con la obligación de aumentar las exigencias en los criterios de concesión de los préstamos, de acuerdo con el informe del Banco de España. Además, 8 de cada diez consumidores han pausado su intención de pedir un crédito durante los próximos seis meses, de acuerdo con el I Barómetro de Préstamos de ASUFIN, que indica también que los consumidores han cambiado las finalidades para las que generalmente piden créditos al consumo.
Créditos: requisitos para la nueva normalidad
Los criterios de aprobación de los bancos para conceder créditos al consumo ahora son mucho más duros, de acuerdo con la Encuesta de préstamos bancarios del segundo trimestre del 2020 publicada por el Banco de España. Además, se espera que se endurezcan todavía más de cara al tercer trimestre.
Las expectativas con respecto a la actividad económica, la menor solvencia de los usuarios y la menor tolerancia al riesgo de los bancos son las tres principales razones de estos cambios.
También se espera, según la encuesta del Banco de España, que las condiciones de los créditos al consumo aplicadas por las entidades empeoren, dando cantidades menores, aunque la competencia entre bancos podría suavizar estos cambios.
Por otra parte, es probable que los bancos pidan a los prestatarios contratos indefinidos, un poder de ahorro mayor, mayor vinculación o trabajar en un sector menos afectado por la pandemia ante la amenaza de otra cuarentena por una segunda ola. Además, también es probable que pidan no haber estado en un ERTE o no haber solicitado una moratoria, aunque estos requisitos no estarán siempre vigentes ni son definitivos, ya que dependerá de los análisis de riesgo que haga cada entidad.
Imagen: fauxels
Los clientes ya no quieren los mismos créditos
Cuando se acerca el verano, especialmente en junio, las finalidades principales para las que se pide financiación son para viajes y vacaciones, para reformas, para la compra de un coche y para pagar los estudios del próximo curso, de acuerdo con el Barómetro de Préstamos al Consumo. Pero debido a la pandemia, en junio de 2020 las finalidades para las que se solicitaba un crédito cambiaron.
Durante el mes de junio la finalidad más común fue la necesidad de liquidez, ya que el 30,9% de las solicitudes se hicieron para este fin, seguido de financiación para la compra de un coche (25,3%), realizar reformas (10,4%), refinanciar deudas (10,2%), financiar estudios (8,8%) y pagar vacaciones (6,2%). Como vemos, la necesidad de liquidez y la refinanciación de deudas son las dos nuevas finalidades dentro del ranking.
El barómetro también ha visto una menor solicitud de financiación, y es que el 85,8% de los encuestados han pausado su intención de contratar un préstamo personal durante lo que queda de 2020 y solo un 14% continúa con su intención de contratar financiación. Unas cifras que coinciden con el Banco de España, el cual señala que durante el segundo trimestre de 2020 la demanda de financiación ha sido más baja, siendo la desconfianza de los consumidores la principal razón de esta caída. Aunque también prevé que suba la demanda durante el tercer trimestre del año.