La recesión y el temor a los impagos ha endurecido las condiciones y exigencias de las entidades financieras para conceder un préstamo. Pero los ciudadanos deben pagar su hipoteca, el colegio de los niños, arreglar una avería del coche… Cuando no hay dinero, se pide prestado y, si el banco no lo da, hay que buscar alternativas. Una de éstas son los créditos P2P, de persona a persona, que ponen en contacto a usuarios que necesitan fondos con otros que están en disposición de prestárselos. El tipo de interés se pacta entre ambas partes y, a menudo, supera el 7%. Los usuarios pueden solicitar entre 3.000 y 15.000 euros a un plazo que oscila de dos a cuatro años.
Comunidades on line
Bancos y cajas prestan ahora su dinero con más cautela y analizan a conciencia a los solicitantes de créditos. Para asegurarse de poder cobrar las cantidades cedidas, escrutan los ingresos periódicos de sus clientes, así como su patrimonio y situación financiera, además de anteriores operaciones prestatarias o los avales con que pueden responder. Quienes no acrediten un contrato fijo, no superen un sueldo mínimo o su situación laboral sea precaria, apenas tendrán oportunidades para acceder a un crédito. Están abocados a enfrentarse a nuevas modalidades de financiación.
Se pueden solicitar entre 3.000 y 15.000 euros, a un plazo de dos a cuatro años
Entre las alternativas que han cobrado más fuerza, destacan los préstamos por Internet entre particulares. Es un sistema de comunidades on line cuyo objetivo es poner en contacto a usuarios que tienen necesidad de liquidez con otros que están en condiciones de ayudarles. A través de esta opción de financiación, se puede solicitar un préstamo de entre 3.000 y 15.000 euros a un plazo de amortización que abarca de dos a cuatro años, sin comisiones. El crédito pueden otorgarlo varios usuarios -cada uno participa con el importe que estime conveniente-, pero el tipo de interés supera de manera habitual el 7%.
La empresa de intermediación se encarga de abonar el préstamo y de cobrar las cuotas cada mes. Es usual que cobre una comisión del 1% anual al usuario que presta y del 1,5% al destinatario del crédito.
Cómo conseguir un préstamo
Para solicitar uno de estos créditos hay que seguir varios pasos:
Los usuarios deben registrarse e iniciar la solicitud. Para ello, hay que indicar los datos personales, económicos y bancarios, así como el importe que se necesita y el plazo de amortización estimado.
La empresa intermediaria estudia la propuesta. Consulta las bases de datos de Asnef (Asociación Nacional de Establecimientos Financieros de Crédito) y, tras esta gestión, otorga al usuario una clasificación: A, B, C o denegada. En función de esta nota, recomienda un tipo de interés u otro.
Si se acepta, el solicitante declara el tipo de interés máximo dispuesto a pagar. En principio, se puede escoger el tipo que se desee, aunque se ha de tener en cuenta que las posibilidades de que una subasta se cubra son mayores cuanto más elevado es el interés.
Es la oportunidad de comentar la situación personal y financiera para transmitir confianza a los usuarios que estén en situación de prestar dinero. Debe aportarse una información detallada de ingresos y gastos, la descripción del trabajo que se realiza y el motivo por el que se necesita el préstamo. Los datos deben exponerse con claridad y ser veraces.
Comienza la subasta, en la que se pujará por financiar un crédito y hacer efectivo un desembolso a cambio del tipo de interés pactado.
Con precaución
Esta vía de financiación tiene algunas lagunas que conviene conocer. Para empezar, en España no hay una normativa que regule este tipo de préstamos. Algunas empresas se dedican a este negocio, a semejanza de otros países de la Unión Europea o Estados Unidos. La de mayor relevancia es Comunitae, pero destaca también partiZipa.com, destinada a emprendedores que necesitan recursos económicos para sus proyectos empresariales.
Han surgido comunidades que conceden créditos con condiciones cerradas
En los últimos meses, han surgido otras comunidades de particulares que conceden créditos con condiciones cerradas, sin margen de negociación. Es el caso del portal Particularmente.com, que adelanta hasta 12.000 euros que se pueden amortizar en un solo mes. La contrapartida es que sus intereses alcanzan casi el 50%, muy por encima de los aplicados tanto por las otras empresas como por los bancos y cajas de ahorros.