La Audiencia de Barcelona ha condenado al Hotel Barcino, situado en el barrio de Ciutat Vella de la capital catalana, a indemnizar con 900 euros a uno de sus clientes a quien le robaron sus maletas en el hall, mientras uno de los empleados le acompañaba a su habitación.
El tribunal provincial revoca así la primera sentencia que desestimó la indemnización por considerar que no había quedado probado que el hombre llevara equipaje cuando llegó al hotel. «Resulta poco creíble que quien va a pasar varios días en una ciudad distinta de la suya se presente literalmente con lo puesto», alega la sentencia de la sala.
Además, la sección decimoséptima de la Audiencia culpa a los empleados del hotel de no haber custodiado el equipaje al tiempo que el cliente era conducido a la habitación, ya que «el recepcionista quedó avisado de que lo dejaba en el hall».
El fallo condena al hotel a pagar al cliente por los daños y perjuicios ocasionados por el robo, ya que «no se observó la diligencia debida y exigible para evitar sustracciones por parte de personas desconocidas, existiendo una defectuosa vigilancia respecto del vestíbulo del hotel».