La Unión de Estanqueros, asociación que representa a unos 10.500 estancos, ha exigido al Ejecutivo un mayor control sobre las ventas de cigarrillos en el segundo canal, especialmente a través de máquinas expendedoras, «porque algunos concesionarios están haciendo competencia desleal con este canal».
En este sentido, denuncian que tienen constancia de que algunos estanqueros gestionan máquinas expendedoras de tabaco en bares, bien directamente o a través de sociedades anónimas, negocio que les reporta como mínimo unas 25.000 pesetas al mes por cada unidad. «El Ministerio de Economía debe regular este segundo mercado ‘prostituido’, antes del concurso, pues la competencia desleal con maquinas automáticas por parte de algunos compañeros ‘piratas’ está arruinando a algunos estancos», ha asegurado Fernández Vicario.
Los propietarios de las máquinas negocian con el propietario del bar y le dan el cien por cien del margen comercial de la cajetilla de tabaco (25 pesetas por paquete), mientras que ellos se encargan de alquilar los canales de selección del tabaco (2.000 pesetas por canal) y las pantallas de publicidad (15.000 pesetas).
Indica que la Unión ha denunciado ante el Comisionado para el Mercado de Tabacos y ante el Ministerio de Sanidad la existencia de unos 200 «compañeros piratas» que controlan, cada uno, de 200 a 1.000 máquinas expendedoras de tabaco. Ha recordado que, según la legislación vigente, los vendedores de tabaco en el segundo canal deben adquirir el producto entre los tres estancos más próximos, «algo que ahora no se está cumpliendo y está arruinando a muchos que no vulneran las reglas del juego».
