El fabricante de automóviles Peugeot ha llamado a revisión a 1.067 propietarios del 307 en España por «un defecto que podría afectar a la conformidad del haz eléctrico del alternador», según informó la Federación de Asociaciones de Consumidores y Usuarios de Andalucía (FACUA).
En sus controles de calidad de la cadena de montaje, la marca detectó algunas unidades «que salieron sin una chapita» que sirve de protector térmico del alternador, y el periodo de fabricación en que pudo producirse ese fallo fue del 26 de septiembre al 17 de octubre de 2002, explicó la firma francesa a FACUA.
La llamada a revisión se inició el pasado 19 de febrero y consiste, según Peugeot, «en colocar esa pequeña chapa en su lugar, dado que de lo contrario bajaría la fiabilidad en el tiempo de vida útil del alternador».
Este modelo ya fue llamado a otra revisión el pasado julio (que en España afectó a 32.000 vehículos) por un fallo en el sistema eléctrico. El objetivo era realizar una carga informática (telecarga) de la BSI, la caja que centraliza y programa informáticamente los equipos eléctricos, cuya puesta al día suprimiría, según la firma, el riesgo de anomalías.
Asimismo, en febrero de 2002, Peugeot hizo otra llamada a revisión, esta vez a cerca de 22.000 unidades del 307 fabricadas antes de octubre del año anterior, para supervisar y, en su caso, cambiar el cilindro del clausor (antirrobo) ya que «podía llegar a bloquear la llave de contacto en cualquiera de sus posiciones dada la presencia de una viruta procedente del propio proceso de producción».