La mayor parte de los inconvenientes de contar con una chimenea pueden contrarrestarse con la instalación de un cassette, el cual ofrecerá un mejor rendimiento térmico, aparte de contribuir a un mayor ahorro energético.
Una imagen muy acogedora y evocadora dentro del hogar se presenta frente a la chimenea contemplando como arde la leña y dejando transcurrir el tiempo al calor del fuego natural. Sin embargo, el contrapunto a esta hogareña escena radica en el apartado energético, dado que la chimenea no es una de las maneras más idóneas para calentar la casa. La causa principal consiste en que el propio calor se escapa por la parte superior de la chimenea, aparte de tener en cuenta que el aire caliente no compensa a medida que la llama de la combustión de la madera va bajando.
Realiza la combustión en un cajetín cerrado con una entrada de aire que puede controlar en todo momento, evitando hipotéticos peligros
Así, todo este tipo de inconvenientes tiene una fácil solución que consiste en la instalación de una chimenea con cassette, que no solo mejorará el rendimiento calorífico del hogar, sino que también aporta ciertas ventajas adicionales.
La chimenea de cassette es la que consta de una doble pared, cerrada en su frontal por medio de una puerta de cristal, especialmente diseñado para soportar y resistir al calor. El procedimiento hace que el aire cálido de la estancia, bien por convección o por el uso de un ventilador, regrese caliente al ambiente de dicha estancia. En suma, se trata de efectuar una combustión en el interior de una cámara cerrada con una entrada de aire regulable en todo momento, evitando hipotéticos peligros.
Algunas de las ventajas de contar con una chimenea de cassette en la vivienda se pueden resumir en:
– Facilidad para controlar la velocidad de combustión, dado que la boca de la chimenea permanece cerrada y tan sólo existe una entrada de aire, sin tener en cuenta la cantidad de madera que está en combustión. De esta forma, la cantidad de calor se controla mejor y se logra mantener estable mientras se lleva a cabo la quema de la leña.
– También se evitan los humos y los malos olores en el habitáculo, descartando, además, una posible intoxicación accidental por monóxido de carbono. Otro punto favorable radica en que tampoco existe la posibilidad de incendios fortuitos, ya que las brasas no saltan fuera de la chimenea.
– Mejor rendimiento térmico a través de la propia circulación forzada de aire y del recuperador de aire caliente.
– Notable ahorro energético. Se puede emplear cualquier tipo de combustible, incluso la parte que arde de la basura doméstica, lo que permite una menor contaminación y reducir la cantidad de basura en cada vivienda.
En el apartado contrario, el de los inconvenientes, lo más destacable se centra en:
– La tarea de limpiar la chimenea cada cierto tiempo, en especial el hollín acumulado en su tiro para prevenir los incendios.
– El transporte, la conservación y la recogida para cargar la chimenea, aparte de vaciar el hogar de cenizas y brasas.
– Olor a humo en el exterior de la vivienda, si la chimenea exterior no es alta y el tiempo está revuelto.
– Estéticamente se pierde la visión directa de la quema de la leña, y sobre todo cuando el cristal de la puerta se vuelve opaco con el humo y el propio hollín.
Tareas de limpieza
Uno de los métodos más efectivos para acometer la limpieza del cristal de la puerta de la chimenea consiste en raspar con una cuchilla, idéntica a la que se suele emplear para cualquier vitrocerámica, y frotar el cristal con papel de periódico con acetona o cualquier disolvente de grasas. Además, dicho papel se podrá emplear para prender el fuego inicial.
En definitiva, la instalación de una chimenea con cassette puede resultar conveniente tanto por sus consideraciones económicas como por sus beneficios ecológicos y energéticos.
Otra opción que no conviene descartar a la hora de instalar la calefacción más adecuada en el hogar es la incorporación de las estufas tradicionales llamadas salamandras. Éstas aportan un mayor rendimiento que la chimenea con cassette, dado que aúnan las ventajas del propio cassette con las suyas propias.
Como no suelen estar empotradas en la pared del habitáculo, sino que suelen estar ubicadas en el interior de la estancia, su sistema de calefacción es de convección directa y aprovecha así todas las partes de la cámara crematoria y la chimenea de humos.
Sin embargo, presenta como inconveniente sus dimensiones, dado que suelen ocupar bastante espacio. De todas formas, hoy en día se pueden encontrar en el mercado las salamandras que más se ajusten a las medidas de cada hogar.