Imagen: Jeffrey Beall
Abogados, médicos, fontaneros…, son muchos los profesionales que pagan un plus para resaltar su nombre en la guía telefónica, pero también hay otros usuarios que, por el contrario, no desean figurar en ella. Aparecer en la guía de teléfono no es obligatorio. En el momento de contratar una nueva línea fija, la empresa operadora debe contar con el consentimiento del cliente para incluirlo en el directorio y, además, éste puede pedir ser suprimido del listín telefónico en cualquier momento. La legislación vigente es muy clara en cuanto a la protección de los datos personales, y asegura que el trámite telefónico estándar para obtener una línea fija debe incluir siempre la pregunta sobre si el nuevo cliente quiere insertar o no sus datos en la guía.
Telefónica, la compañía de telecomunicaciones mas importante de España y propietaria de la red de cableado que utilizan la mayor parte del resto de empresas, solicita el consentimiento del cliente tanto en el formulario web de alta de línea, disponible en www.telefonicaonline.com, como en el cuestionario que efectúa un teleoperador en la línea de atención al público 1004. Ese mismo número es al que los usuarios tienen que llamar cuando ya son clientes y sus datos aparecen en la guía si toman la decisión de borrarse de la misma. El contacto para darse de baja debe realizarse desde el teléfono cuya aparición se pretende suprimir. Una vez que el teleoperador comprueba, verificando el número de documento, que quien realiza la llamada es el titular de la línea, procede a excluir sus datos en un plazo no superior a diez días de la versión web de la guía telefónica, y a partir de la edición siguiente de la versión impresa.
En el caso de tener el contrato con otra empresa, en el procedimiento de cambio de plan de Telefónica al nuevo operador se vuelve a consultar sobre si se quiere o no figurar en el directorio telefónico. Así sucede con Jazztel (llamando al número 1074) y Aló (en el número 902010192), por ejemplo. En estos casos, si el usuario ya aparece en la guía y quiere excluirse, debe contactar con el número de atención al cliente de su proveedor. El procedimiento es el mismo que el de Telefónica, y en todos los casos el trámite es gratuito.
Protección de datos
La legislación marco que resguarda los derechos de las personas en este asunto es la Ley Orgánica 15/1999 de protección de datos personales. En su artículo 6 se manifiesta que el tratamiento de los datos de carácter personal «requerirá el consentimiento inequívoco del afectado, salvo que la ley disponga otra cosa». En el artículo 30 se establece, asimismo, que los usuarios «tendrán derecho a oponerse, previa petición y sin gastos, al tratamiento de los datos que les conciernan, en cuyo caso serán dados de baja del tratamiento, cancelándose las informaciones que sobre ellos figuren en aquél, a su simple solicitud».
De manera más específica, la Ley 32/2003 General de Telecomunicaciones consigna, en su artículo 38, que la elaboración y comercialización de las guías de abonados a los servicios de comunicaciones electrónicas y la prestación de los servicios de información sobre ellos se realizará en régimen de libre competencia garantizándose, en todo caso, a los abonados el derecho a la protección de sus datos personales, incluyendo el de no figurar en dichas guías.
La Agencia Española de Protección de Datos vela por la aplicación de la legislación, atiende a las reclamaciones, y controla y sanciona los incumplimientos
El Reglamento sobre el Servicio Universal y la Protección de los Usuarios, en su título V, también se extiende sobre el tema. Toda la normativa se encuentra disponible en www.usuariosteleco.es, la página web de la Secretaría de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, dependiente del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio. El organismo público encargado de resguardar los derechos de los usuarios es la Agencia Española de Protección de Datos. Creada en 1993, se ocupa de velar por la aplicación de la legislación, atender a las reclamaciones de los usuarios afectados y controlar (y eventualmente sancionar) los incumplimientos. En su sitio web se explica el procedimiento que debe seguirse para efectuar una denuncia en caso de incumplimiento, que será válida siempre y cuando se disponga de pruebas que lo acrediten. Asimismo, se ponen a disposición de los usuarios varios modelos de cartas para efectuar las reclamaciones ante la misma agencia.
Llamadas comerciales
Uno de los motivos que impulsan con más frecuencia a un usuario a desear borrarse de la guía es su impotencia frente a las continuas llamadas que recibe en las que le ofrecen todo tipo de productos, cursos, promociones…, ya que muchas empresas utilizan las páginas blancas para la captación de nuevos clientes. En numerosas ocasiones, los vendedores telefonean incluso hasta seis o siete veces al mismo usuario, a pesar de que su respuesta haya sido desde la primera vez que la oferta no le interesaba.
Las continuas llamadas para ofrecer promociones son una de las principales causas para no querer figurar en la guía telefónica
En principio, se considera a las guías telefónicas como fuente pública de datos, por lo que es legal usarlas para publicidad, siempre y cuando sea una persona quien hable y no una grabación (en ese caso es ilegal). De todos modos, el usuario tiene derecho a no recibir llamadas comerciales si así lo desea. Con sólo pedir al vendedor que lo borre de su base de datos debería ser suficiente; así, el artículo 30 de la Ley 15/1999 declara que los interesados «tendrán derecho a oponerse, previa petición y sin gastos, al tratamiento de los datos que les conciernan, en cuyo caso serán dados de baja del tratamiento, cancelándose las informaciones que sobre ellos figuren en aquél, a su simple solicitud».
La mejor opción, sin embargo, es solicitar directamente a la empresa proveedora del servicio telefónico que sus datos, aun figurando en la guía, no sean utilizados con fines comerciales. En este caso, su número de teléfono aparecería precedido por una letra «p» en la edición impresa, una marca que indica a las empresas la imposibilidad de usar ese número para comunicar sus promociones.