En lo que a consumo de energía eléctrica se refiere existen muchos hábitos que pueden ser modificados para realizar un consumo más responsable de todos aquellos aparatos eléctricos de los que disponemos en nuestro hogar.
Entre otras fuentes de consumo eléctrico, un buen uso de los electrodomésticos es fundamental para ahorrar algunos euros en la factura de la electricidad. Algunos de los siguientes consejos y hábitos ayudarán a que disminuya realmente el consumo:
– la mayoría sabemos que no es aconsejable abrir el frigorífico más allá de lo necesario ni dejar las puertas abiertas, pero tan importante como eso es descongelar la nevera o el congelador cuando veamos que en sus paredes se forma un capa de hielo. Esto se debe a que estas incrustaciones de hielo hacen que el motor tenga que trabajar de una forma más continua para mantener la temperatura fijada.
– Cuando utilizamos el horno y éste está en marcha debemos evitar abrirlo con frecuencia porque pierde calor, así que recomendamos utilizar la luz interna que incluyen hoy en día la practica totalidad de los hornos.
– otro electrodoméstico con cuyo uso podemos ahorrar es la plancha. Probablemente lo desconozcamos pero si planchamos primero aquellas prendas que exijan una temperatura más baja y dejamos en último lugar las que requieran más calor, nos habremos ahorrado el tiempo que necesita la plancha para enfriarse hasta la temperatura necesaria para planchar las prendas que necesitan temperaturas inferiores..
Además de los electrodomésticos, adquirir fluorescentes y bombillas de bajo consumo merecen la pena porque pese a que el coste inicial es mayor que el de las habituales, el consumo es mucho menor y acaban resultando más rentables.