Hay quienes gracias a la creatividad hacen maravillas, especialmente con aquellos muebles que venden listos para armar. Unos ladrillos barnizados o pintados pueden servir de bonita repisa, combinados con simples tablas de pino y que pueden resultar ideales para colocar libros y plantas.
Unos neumáticos viejos rellenos con espuma y cubiertos con una bonita tela escocesa pueden convertirse en los primeros sillones del salón si no se cuenta con presupuesto suficiente para comprar unos nuevos. La mesa puede montarse con ladrillos barnizados y un cristal encima de ellos. En fin, basta tener buen gusto para combinar colores y formas, especialmente en aquellos espacios muy reducidos.
Uno de los mejores recursos en los pequeños espacios es dividir y crear diferentes ambientes. Para lograrlo se necesita de las persianas, los biombos o fijos (columna, escalones). Otro buen aporte es el de los muebles multiusos, es decir, que cumplen varios objetivos. Por lo general, se trata de elementos decorativos que pueden cumplir diversas funciones, como un baúl, que puede ser utilizado como mesa para el salón. Muy similar es lo que ocurre con los sofá-camas. Algunos llevan incorporados en su parte inferior elementos contenedores como cajones.