Uno de los lugares que con más esmero ha de amueblarse y decorarse en un hogar es el dormitorio del bebé. Esta habitación se caracteriza por la necesidad de que rezume el máximo de dulzura y relax. En consecuencia, delicadeza y armonía son las características que deben destacar elementos como, por ejemplo, el armario, la cuna, la mesa de cambiador, el chifonier, etc…
Actualmente, se encuentran de moda, y a precios muy asequibles, los muebles de madera lacada con tiradores de formas fantasiosas como las de estrellas, bolitas y hasta caras de animales. En cualquier caso, lo ideal a la hora de adquirir los muebles es que la habitación sea sencilla, con muy pocas piezas
A la hora de equiparar los dormitorios infantiles, los muebles modulares se acomodan perfectamente a cualquier disponibilidad de espacio. Al mismo tiempo, este tipo de soluciones tiene la enorme ventaja de que van creciendo a medida que lo hacen los niños con lo cual darán cumplida respuesta a cada requerimiento propio de la edad. De esta forma, la compra de los muebles se rentabilizará con el paso de los años. Y es que, no en vano, la capacidad de los muebles modulares roza lo asombroso cuando integran en un espacio único la cama, el armario y la zona de estudio.
Con todo, los muebles modulares originan composiciones de lo más variadas. Las más vanguardistas son las que recurren al metal en patas de sillas, columnas y soportes de estanterías, confiriendo a los muebles un estilo original, joven y práctico al tiempo que conceden acabados resistentes.
Cualquiera que sea el estilo elegido para la habitación, ésta se puede complementar después con elementos auxiliares de mobiliario, del tipo de una cómoda, una mesita con sillas para sentarse a jugar con los amigos o estanterías.