El Ministerio de Industria, Energía y Turismo ha enviado a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) un proyecto de Real Decreto que establece que la facturación de la electricidad de los consumidores domésticos se basará a partir de ahora en la lectura real de los contadores, realizada cada dos meses. Con la aplicación de esta medida se conseguirá que los clientes paguen solo la electricidad que consuman.
Un proyecto de Real Decreto establece que la facturación de la luz de los consumidores domésticos se basará a partir de ahora en la lectura real de los contadores, realizada cada dos meses, y no uno solo como se hacía hasta ahora. La principal ventaja de su aplicación es que el consumidor pagará solo por lo que consume, ya que la factura de la luz se basará en el consumo real y no en el estimado. De todos modos, se contempla que los clientes que lo deseen puedan mantener el sistema de facturación mensual.
El sistema propuesto sustituirá a la ya habitual factura mensual de los contadores, en vigor desde septiembre de 2008, que incluía una facturación estimada que se realizaba en meses alternos y que ha generado un importante número de reclamaciones por parte de los consumidores debido a la complejidad asociada a las regularizaciones de los consumos.
Se introduce la posibilidad de que los consumidores aporten la lectura de su contador en el caso de que al distribuidor no le sea posible hacerlo
No obstante, habrá flexibilidad en la aplicación de esta medida, ya que si el consumidor lo requiere por cualquier circunstancia, se contempla la posibilidad de continuar con la realización de facturaciones mensuales de los equipos de medida.
En la misma línea de facilitar la realización de facturaciones sobre los consumos reales, se introduce también la posibilidad de que los consumidores puedan aportar la lectura de su contador en el caso de que al distribuidor le sea imposible hacerlo. No en vano, esta posibilidad de lectura del propio contador ya existe en otros suministros domésticos como el gas o el agua.
Ventajas y desventajas del nuevo modelo
La aplicación de este nuevo modelo para leer la factura de la luz en los hogares españoles conlleva nuevas ventajas para sus usuarios, aunque también genera alguna que otra contrapartida.
Ventajas:
Permite realizar la factura sobre la base del consumo real, no estimado como se hacia hasta ahora.
Da flexibilidad a los usuarios, ya que también se puede mantener el sistema de facturación mensual, si este es su deseo.
Se incorpora la posibilidad de que los consumidores puedan aportar la lectura de su propio contador eléctrico.
El sistema empleado no es tan complejo. Ello redunda en beneficio del consumidor, y de la administración, que evitará numerosas reclamaciones por parte de los usuarios.
Inconvenientes:
Se elimina la facturación mensual para pasar a bimestral, y de esta forma pagar más aunque sea cada dos meses.
Cualquier cambio en el modelo de la facturación eléctrica conlleva una serie de dudas entre los consumidores hasta que se familiaricen con la aplicación de la medida.
Este cambio no afectará a la posible contratación de tarifas o planes de ahorro por parte de las compañías eléctricas, ni a los descuentos que aplican.
Las compañías eléctricas han desarrollado una serie de tarifas que permiten tener controlado el gasto de la utilización de esta energía por parte de los consumidores domésticos. Su estrategia se basa en tener un precio del consumo de la energía garantizado durante un periodo de tiempo determinado, entre uno a tres años, aunque con las limitaciones derivadas de la variación al alza o a la baja de los componentes regulados.
Estas tarifas pueden contratarse con la empresa de distribución. Para su formalización basta conocer el tipo de potencia contratada: si es inferior a 10 kilowatios con discriminación horaria, que implica de unos descuentos de hasta el 6% en su consumo, o si por el contrario es superior a esa potencia o inferior a 15 kilowatios con discriminación horaria, también con bonificaciones similares en su factura.
