Las compañías de la luz siguen trabajando para mejorar su reputación. Tras varios años en el podio de las corporaciones que más reclamaciones reciben, junto a las empresas de telecomunicaciones y los bancos, las eléctricas decidieron hacer más sencillas las notificaciones de los recibos. Ahora bien, ¿qué facilidades dan cuando emiten mal una factura de la luz? En este artículo se revisan cuáles son los pasos que hay que seguir para reclamar a la compañía eléctrica y recuperar el dinero.
¿Cómo reclamar una factura de la luz? Negociar, lo más rápido
Es probable que las olas de calor que se han sufrido este verano en España hayan tenido su reflejo en la factura de la luz de agosto. No obstante, si el incremento es mucho más elevado de lo considerado como normal, tal vez haya sido por otro problema. Puede ocurrir que el recibo sea desproporcionado porque un vecino engancha su instalación al suministro del usuario o el contador no está enviando bien las lecturas de consumo. Entonces, ¿qué hacer en estos casos?
El primer paso para reclamar a la compañía eléctrica es exponer el caso a la empresa. Para ello, se debe poner una reclamación formal a la compañía de la luz y la empresa podrá responder en los siguientes 30 días.
Lo habitual en estos casos es que la eléctrica envíe al cliente un técnico para revisar si existe un fallo en el contador de la luz o alguna incidencia en la instalación. Este tendrá un coste, si el operario no detecta una avería, por lo que es esencial preguntar antes. No obstante, es necesario que la revisión la haga un técnico de la compañía. Es más, en el supuesto de que la empresa señale que tiene que ser el usuario quien contrate los servicios de un electricista, es aconsejable pedir hablar con otro asesor de la compañía. Y es que solo los instaladores de la propia eléctrica (o sus autorizados) pueden abrir y manipular el contador y la instalación.
Para evitar problemas, es importante que el contacto sea en todo momento con la comercializadora, y no con la distribuidora, de modo que no haya información cruzada entre las distintas partes que alargue el incidente.
Si no hay acuerdo al reclamar una factura de la luz, mediación externa
Si en los siguientes 30 días no se ha recibido una respuesta por parte de la compañía o no se está de acuerdo con su solución, es posible recurrir a agentes externos, como la Oficina de Consumo del municipio.
Para hacer una reclamación a través de esta vía, se debe aportar el identificador que dio la compañía en el momento que se le puso la reclamación formal. Además, habrá que rellenar un formulario o carta en la que se expondrá el caso que ha llevado a solicitar la intervención de la Oficina de Consumo, así como todas las pruebas que puedan demostrar la situación. Este trámite se puede hacer presencial o telemáticamente sin ningún coste.
La respuesta a través de esta vía puede tardar hasta seis meses y no requiere la contratación de abogados, ya que es un acuerdo entre las dos partes de forma amistosa. En definitiva, es una negociación con la supervisión de un agente externo y gratuita para todos los particulares. Pero durante este tiempo se aconseja estar al día en el pago de las facturas para evitar el corte del suministro.
¿A quién recurrir cuando no hay entendimiento?
Si después de acudir a las otras dos vías, no se consigue que la compañía rectifique la factura de la luz o revise la incidencia que la está ocasionando, la última opción es ir a la Junta Arbitral, siempre y cuando la eléctrica esté dada de alta en el sistema de arbitraje.
Para tramitar una reclamación a través de la Junta Arbitral, se debe aportar toda la documentación que se ha ido añadiendo en los otros casos, además de los números de expediente que hayan ido abriendo.
Es importante saber que la decisión a la que llegue esta entidad será vinculante para ambas partes. Es decir, si el usuario tiene razón, la compañía deberá abonar la factura. Pero si existe un problema en la instalación que haya hecho el cliente, como una manipulación de la misma para enganchar a un vecino, se deberán asumir los costes y las sanciones que apliquen. Por este motivo, no está de más que, en caso de sospechar que existe una segunda acometida conectada al suministro, se ponga una denuncia en la Policía o Guardia Civil.