La industria de la construcción, además de multiplicar la cantidad de viviendas y afianzarse como un potente motor de la economía española, está impulsando otro tipo de negocios, como las empresas de limpieza en edificios comunes. El gasto por el mantenimiento del espacio compartido por todos los vecinos oscila desde los 100 a los 200 euros anuales, dependiendo de la cantidad de pisos que tenga el inmueble y de las características del servicio solicitado. Hay que tener en cuenta que la contratación de este servicio no es obligatoria por parte de los vecinos, pero si se decide por mayoría, todos deberán acatar la propuesta elegida. Así se refleja en la Ley de Propiedad Horizontal que especifica “la obligación que tienen todos los propietarios de hacerse cargo del mantenimiento del inmueble”.
Mantenimiento del edificio
En España desde el año 2006 se han creado más de 17.000 compañías dedicadas a esta labor, contratando a un total de 600.000 empleados, según Francisco Sánchez, presidente de “Clearing House”, una empresa de limpieza con 17 años de experiencia. Estos datos reflejan la buena salud de un sector que se encuentra en un período de crecimiento: según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE) su expansión fue de un 10,2% en 2006, y el personal ocupado registró un incremento del 3,7%.
El éxito de este tipo de negocios está relacionado con el servicio tan importante que representan en una comunidad en la que muchos vecinos superan los 60 años de edad y otros apenas pisan las escaleras del portal cuando llegan por la tarde-noche. La falta de tiempo, por un lado, y las limitaciones físicas, por otro, convierten a estas empresas en una ‘salvación’ para cumplir con la ley y hacerse cargo del edificio, aunque las cuotas mensuales de la comunidad de vecinos se incrementen un poco más debido a este gasto concreto.
Los costes de estos servicios varían mucho según la empresa contratada. Por eso es conveniente comparar precios y optar por la compañía que inspire mayor confianza a un menor coste. Pero también se debe tener en cuenta el presupuesto que la comunidad destina a este servicio, ya que determinará la periodicidad del trabajo y el régimen de contratación semanal, mensual o anual. Por ejemplo: una empresa que proporciona un servicio de limpieza tres veces a la semana en una finca de nueve plantas con 27 pisos puede costar aproximadamente unos 3.240 euros al año, es decir, 120 euros por vecino y 360 euros por planta. Este importe incluye la limpieza del portal, la escalera, los cristales y, cada seis meses, el pulido del suelo. Son precios que varían en el caso de que se pida un servicio por horas -que en general cuesta 12 euros la hora- o de que se solicite un presupuesto general, en donde las empresas tienden a redondear el coste para mantener el servicio durante todo el año.
Algunas comunidades de vecinos optan por contratar a una persona con referencias en el barrio. Los costes pueden resultar un poco más accesibles, aunque en general se aproximan a los 110 euros. En estos casos se debe tener en cuenta que hay tareas que sólo una compañía especializada puede hacer, como pulir el suelo. Por otra parte, este trabajo implica contemplar los cargos derivados del seguro correspondiente, salvo que la persona contratada esté dada de alta en la seguridad social como autónoma.
Un servicio detallado
- Tratamiento de suelos: El pulido, cristalizado y abrillantado se lleva a cabo con máquinas pulidoras especiales que respetan el material con que esté hecha la superficie, sea mármol, cerámica, baldosa, etc. Dependiendo del servicio pueden llegar a costar hasta 12 euros el metro cuadrado, aunque a mayor superficie, se pueden obtener mayores descuentos. Por ejemplo: a partir de 60 metros cuadrados el precio se reduce hasta los cuatro euros el metro cuadrado.
- Limpieza de escaleras: Se lleva a cabo con artefactos que permiten el acceso a rincones y recovecos. Los precios rondan sobre los cinco euros el metro cuadrado.
- Limpieza de cristales: Este servicio está orientado básicamente a limpiar las ventanas ubicadas a gran altura a través de la utilización de escaleras especiales. El precio mínimo es de 12 euros la hora.
- Otros servicios: El cuidado de plantas, la sustitución de bombillas situadas a gran altura, la limpieza de piscinas o la higiene de los ascensores también son algunas otras tareas que realizan las empresas especializadas. Los precios para este tipo de trabajos llegan a costar hasta 15 euros por hora.
Seguridad y confianza
Contratar a la persona que se haga cargo de la higiene del edificio no es una tarea fácil. Uno de los problemas que presentan las empresas de limpieza es la rotación de personal, un inconveniente que afecta a los clientes porque ven pasar a lo largo de un año a diferentes empleados. ¿Cómo asegurarse de que el nuevo trabajador es de confianza? La respuesta a esta pregunta muchas veces recae en la percepción del presidente de la comunidad -que es el encargado de contratar este tipo de servicios- cuando conoce a la persona que se va encargar del cuidado del edificio. Sin embargo, no está de más solicitar todas las referencias posibles, ya sea de la compañía o de sus propietarios, a quienes, en última instancia, se tendrá que reclamar por una falta de sus empleados.
Es conveniente que durante los primeros meses, y para asegurarse de que todo funciona correctamente, la comunidad de vecinos designe a un encargado para vigilar al empleado enviado por la compañía. De esta manera puede constatar que las tareas se llevan a cabo correctamente y controlar que se cumplan los horarios y los días pactados.