Más de 40 días confinados en casa han disparado el gasto energético en los hogares españoles, según diversos estudios. El consumo de la electricidad está registrando incrementos de entre el 15 % y el 22 % durante el confinamiento, una cifra que se eleva hasta el 28 %, de media, como afirman fuentes del sector. ¿Cómo ahorrar energía si teletrabajas, los niños reciben sus clases y juegan por Internet, y utilizas la cocina y el horno más horas de lo habitual? En este artículo te damos algunas pistas que pueden ayudarte en esta difícil misión, como solicitar la tarifa de discriminación horaria, cocinar varios platos a la vez en el horno o no dejar el ordenador en stand by.
La tarifa de luz (y gas) importa
Gastar más o menos luz depende del consumo, pero tu factura también depende de la tarifa que tengas contratada. En España hay distintos tipos de tarifas eléctricas, y tener una u otra puede ayudarte a ahorrar. Si quieres pagar menos por la electricidad que consumes, tienes algunas opciones:
- Pasarte a la Tarifa de Discriminación Horaria, con un horario más barato entre las 23:00 y las 13:00 horas. Esta modalidad puedes contratarla tanto en el mercado libre como en el mercado eléctrico regulado.
- Acogerte al bono social. Este bono protege a algunas familias numerosas y hogares con bajos ingresos, con descuentos en sus facturas que oscilan entre el 25 % y la totalidad. Durante el estado de alarma se ha aprobado el aumento de los beneficiarios del bono social: entre el 30 de marzo al 5 de abril, «los nuevos beneficiarios ascendían a 16.690», según la ministra de Hacienda, María Jesús Montero. Si lo deseas, puedes informarte sobre la posibilidad de solicitarlo y abaratar tu recibo de la luz (mira las condiciones aquí).
Además, en cuanto al ahorro de gas, también te puede ayudar la congelación de los precios de las bombonas de butano y la tarifa regulada del gas natural (TUR) durante dos trimestres.
Imagen: Finn-b
Consejos prácticos de ahorro
Para ahorrar energía en estos momentos en que apenas salimos de nuestros hogares, es necesario hacer un uso racional de dispositivos y electrodomésticos. Para tratar de no elevar en exceso una factura que muy probablemente crezca en estos meses, puedes seguir estos consejos:
- Apagar luces. Supone un ahorro seguro, pero esta archiconocida recomendación se incumple de manera reiterada (en especial, por parte de los niños, que ahora pasan muchas horas en casa). Es imprescindible para reducir tu factura —y cuidar el medio ambiente— que apagues las luces de las habitaciones en las que no hay nadie y que las enciendas solo cuando no haya luz natural.
- Ordenador y tableta. El uso de ordenadores y tabletas se ha disparado con el teletrabajo, el «telecole» y la preocupación por recibir información continuamente actualizada sobre el avance o freno de la pandemia. Puede que no tengas más remedio que utilizarlos, pero recuerda hacerlo solo lo imprescindible y no dejarlos nunca en modo stand by.
- Televisor. Como en el caso del ordenador, es probable que las películas y series que ves en la tele ocupen muchas de tus horas de ocio, o de las de tus hijos. Para ahorrar, apágala siempre, sin dejarla en stand by.
- Móvil. El empleo del smartphone (llamadas, mensajes, mirar noticias…) se ha disparado, sobre todo en las primeras semanas del confinamiento. Recuerda cargarlo solo cuando la batería esté agotada. ¿Cómo? Cárgala con el teléfono apagado o hazlo en modo avión para que sea más rápido.
- Horno. La cocina está siendo uno de los entretenimientos favoritos durante el confinamiento: pan casero, con o sin levadura, repostería… El horno gasta mucha electricidad, pero si se aprovecha el calor residual y se apaga antes de terminar de hacer un plato, se puede ahorrar. Además, muchos hornos «permiten cocinar varios platos a la vez, se pueden incluso mezclar platos salados y postres sin que se mezclen olores o sabores», explica Cristina Reque, de Miele Iberia.
- Microondas. Siempre que la receta o tu tipo de microondas lo permitan, puedes hacer los platos en este tipo de horno, pues su consumo es cerca de un 60 % menor que el del horno convencional.
- Frigorífico. Abrir y cerrar continuamente el frigorífico hace que se gaste mucho más (se modifica la temperatura interior y requiere mucho consumo por parte del aparato para recuperarla). Por ello, Reque recomienda que, si quieres cocinar, «pienses previamente todos los ingredientes que vas a utilizar para sacarlos de una sola vez». Además, hay muchos frigoríficos que disponen de una función que deja bajar la temperatura de forma temporal.
- Lavadora. Si tu lavadora tiene programa automático, debes usarlo, «pues está diseñado para ajustar el agua y la energía a la carga que se está lavando en cada momento», explica la experta. El centrifugado es conveniente realizarlo a toda la potencia que permita la etiqueta de la prenda, para que salga lo más seca posible y limitar así el uso de la secadora.
- Lavavajillas. Como en la lavadora, conviene emplear el programa automático. Asimismo, hay que recordar que debe usarse cuando esté lleno.
- Pequeños electrodomésticos (plancha, secador, etc). Los pequeños electrodomésticos consumen mucho, por lo que si tienes que utilizarlos, hay que sacarles su máximo rendimiento. Si enciendes la plancha, debería ser para planchar la máxima cantidad de ropa posible. En el caso del secador y la plancha del pelo, si ahora que no sales de casa puedes evitar su uso, tu economía y tu cabello lo agradecerán.