Los descuentos para jóvenes que conceden los ayuntamientos y las empresas de transporte son una ayuda esencial para la exigua economía de los estudiantes, agravada con la crisis. El trámite para acceder a los beneficios para viajar implica como requisito básico indispensable la acreditación mediante tarjeta o carné de estudiante, pero el lugar de gestión, los requisitos y el montante de la bonificación dependerán de la norma vigente en cada comunidad autónoma, en convenio con sus universidades y ayuntamientos. Para desplazamientos de media, larga distancia e internacionales, las tarjetas como ISIC o el Carné Joven Europeo son indispensables para moverse a bajo precio por España, Europa y el mundo.
Descuentos para estudiantes
Los bonos mensuales o trimestrales, con una tarifa especial que suponen un 35% de ahorro de media, son la forma más habitual de ofrecer a los estudiantes un acceso al trasporte diferenciado. El origen y lugar de gestión de estas ayudas es diverso, ya que están descentralizadas en distintos organismos: los ayuntamientos mediante convenios con las universidades o empresas de transporte, subvenciones gubernamentales dirigidas a los centros de estudios, las administraciones autonómicas, cooperativas de consumidores y usuarios o asociaciones de estudiantes. Todos estos determinan el modo de acceso a las bonificaciones.
Los abonos de RENFE se obtienen al estar matriculados en universidades y centros oficiales de enseñanza
En la mayoría de los casos, para acceder a los descuentos, hay que acreditar la condición de estudiante. Para ello es indispensable tramitar el carné o tarjeta correspondiente en el centro donde se cursen los estudios.
Bonificaciones en tren y autobús
Los servicios de cercanías de RENFE destacan por la oferta variada de bonificaciones dirigida a los estudiantes. Su producto más extendido es el Abono Estudio, disponible para quienes utilicen los servicios de cercanías de las provincias de Cádiz, Málaga, Sevilla, Murcia y Valencia. Pueden obtenerlo los estudiantes matriculados en universidades y centros oficiales de enseñanza, y se tramita sin coste alguno a través de la web de RENFE o en cualquiera de las oficinas de Cercanías. El abono que se obtiene es personal e intransferible. Vale para un recorrido determinado y declarado en el momento de adquirirlo.
La vigencia es trimestral, para viajar sin límite de desplazamientos en un trayecto concreto, con una tarifa hasta un 40% más económica. En Asturias, el servicio de Cercanías ofrece también el Abono Universitario CTA y en Madrid, el abono trimestral para universitarios. La acreditación durante el viaje se realiza con el abono más el DNI o documento que identifique al beneficiario.
También los autobuses urbanos de diversas ciudades españolas brindan bonificaciones en sus tarifas para los estudiantes. Es un bono específico cuyo valor varía en cada localidad en función de los convenios celebrados entre ayuntamientos, comunidades, empresas y centros de estudio. Incluso los requisitos pueden variar sensiblemente en diferentes lugares. En algunos casos, solo se pueden beneficiar los alumnos que estén empadronados en la localidad, que deben solicitar este abono especial en los ayuntamientos o las consejerías competentes. En ciertos lugares de Galicia, se exige también una certificación de la renta anual familiar, que puede ser determinante para la concesión o no del descuento.
Para informarse de estos descuentos y bonos en detalle, lo mejor es consultar su disponibilidad en los ayuntamientos o en la universidad y centros de enseñanza en cuestión. También organizaciones civiles universitarias independientes o cooperativas de estudiantes desempeñan un papel importante en la gestión de bonificaciones y beneficios. Es lo que ocurre en País Vasco con Bidai Txungo o en Castilla y León con la Asociación Universitaria Cultural Palentina. Estas organizaciones gestionan ayudas gubernamentales o acuerdos con empresas, tanto para desplazamiento urbano como para viajes de ocio.
Bonificaciones en desplazamientos de media y larga distancia
El Carné Jóven de RENFE permite a quienes tienen entre 14 y 26 años beneficiarse de bonificaciones especiales, con descuentos alrededor del 20%, en trayectos de media distancia convencional o en AVE-larga distancia. En este caso, el beneficio no es solo para estudiantes: basta con presentar el Carné Joven emitido por cualquiera de las comunidades. El descuento es válido para trayectos sencillos en cualquier día, tren o clase en el territorio nacional.
También la suscripción a carnés internacionales como el GO 25 ISTC de la UNESCO o la tarjeta Rail Plus Junior, así como algunas tarjetas de crédito para jóvenes, permiten obtener descuentos en viajes en tren. Incluso para algunos destinos específicos del extranjero, RENFE no requiere más acreditación que la de identidad para conseguir descuentos de hasta un 30%. Es lo que sucede en el Elipsos Trenhotel que recorre Madrid-Chamartín-París y Barcelona-París, Barcelona-Milán/Zurich, o en el Trenhotel Lusitania (Madrid-Lisboa) y Trenhotel Surexpreso (Irún-Lisboa-Hendaya), que disponen de precios especiales para jóvenes de 12 a 25 años, con la presentación de cualquier documento acreditativo de la edad.
La suscripción a carnés internacionales otorga beneficios en viajes al extranjero
En todo caso, si se es estudiante y se busca reducir al mínimo los gastos durante el periodo de estudios como en épocas de ocio, quedarse solo con el carné de estudiante de la universidad o centro de enseñanza no es suficiente. El Carné Internacional de Estudiante, más conocido como Tarjeta ISIC, ya agrupa a más de 4,5 millones de estudiantes en 120 países y contempla alrededor de 40.000 descuentos en hoteles, tiendas, restaurantes, además de billetes de avión y de tren. Para obtenerlo, basta con acreditar que se es estudiante a tiempo completo, estar matriculado en un curso académico reconocido oficialmente, ser mayor de 12 años, entregar una foto de carné y pagar 6 euros por su expedición.
Lo mismo ocurre con el Carné Internacional para Jóvenes (IYTC). Esta acreditación la gestiona la International Student Travel Confederation y permite obtener los mismos descuentos y servicios del ISIC. El Carné Joven Europeo (European Youht Card), un programa iniciado en 1988 y dirigido a jóvenes de 14 a 30 años (o 26 en algunos países o comunidades), facilita el acceso a bienes culturales y servicios diversos. Su finalidad es, sobre todo, favorecer la movilidad geográfica.