Consumo navideño

Las calles engalanadas con luces y adornos y las hordas de consumidores que abarrotan las zonas comerciales de las grandes ciudades son el signo inequívoco de que ha llegado la Navidad. Caminar un sábado por la tarde por el centro de Madrid puede resultar, cuando llega diciembre, una aventura desagradable para los menos dados al consumo masivo. La imagen de las tiendas repletas de público haciendo grandes colas para pagar se repite con frecuencia en las urbes españolas, y, visto así, es posible creer que la economía va sobre ruedas.

Pero no todo es color de rosa. Una tasa de inflación que alcanza ya el 4% (el doble que la Unión Europea, según la CECU), un crecimiento de sólo el 1,8% y el cada vez más progresivo aumento del endeudamiento de las familias, que llega al 40% de su renta anual, son factores que influirán notablemente en el gasto de los españoles durante estas fechas. En términos generales, las asociaciones de usuarios creen que en 2002 se producirá una contención notable a la hora de las compras navideñas. Como siempre, el mayor consumo se producirá en la alimentación, el ocio y la cultura.

Los productos más solicitados serán los turrones, moluscos y crustáceos, el cordero, las bebidas alcohólicas, la sidra y el cava. Continuará la demanda de lubina y dorada y la ternera sustituirá a las aves tradicionales, que mantienen un precio alto. La CECU estima que los españoles gastarán 115 euros en lotería; 95 en cenas en el hogar; 112 en restaurantes; 90 en ocio y tiempo libre, 97 en regalos y 114 en juguetes. En total, 623 euros. La CEACCU (que incluye en sus previsiones los apartados de aguinaldos y transporte, ropa y accesorios y viajes), en cambio, prevé que cada ciudadano de este país gastará 200 euros en comida y bebidas; 120 en ocio; 160 en regalos y juguetes; 60 en ropa y accesorios; 112 en lotería; 160 en viajes y 20 en el apartado de aguinaldos y transporte. En total, 832 euros. El gasto general puede estar alrededor de los 2.800 millones de euros, frente a los 3.000 millones de 2001.

Los hábitos de consumo navideño estarán marcados en 2002 por una subida generalizada de precios, hecho que se ha notado a lo largo de todo el año en especial por la entrada en vigor del euro. Estas subidas propiciarán una clara intención de contención del gasto, aunque los consumidores, según las diversas asociaciones que los representan, seguirán lanzándose a la rutina de las compras de fin de año, muchas veces motivados por la presión publicitaria. Las partidas que más se resentirán, según la CEACCU son las de viajes, por un lado, y las de regalos y juguetes.

El año pasado, según un estudio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), cada español gastó durante las Navidades una media de 800 euros. Se gastaron 260 euros en regalos, 200 en comidas especiales y 85 en lotería, entre otros aspectos. El barómetro del CIS también dejó claro que, por lo general, los españoles disfrutan de una jornada de vacaciones durante la Navidad, que casi siempre aprovechan para visitar a sus familiares, salir de viaje o simplemente descansar.

Miguel Ángel Fraile, el portavoz de Cepyme, la Confederación Española de Pequeñas y Medianas empresas, que representa a unos 400.000 comerciantes (el 70% del sector en el territorio nacional), cree que, aparte de los productos alimenticios tradicionalmente demandados en Navidad, este año, como siempre, harán su agosto las tiendas de juguetes y de regalos, así como el sector de la electrónica, perfumería y joyería. “Todo el mundo espera con optimismo la campaña. Dentro del contexto general esperamos un aumento del 6% en las ventas. El año pasado ese incremento fue del 5% de media. En el sector hay una cierta confianza. No hay alarma. Creo que no tenemos ni alegría ni tristeza”, señala Miguel Ángel Fraile.

Fraile también cree que la tragedia ecológica que afecta a Galicia por el vertido del petrolero Prestige, creará un efecto más bien “psicológico” en los consumidores que no se traducirá en menores ventas, pues los establecimientos se proveen de pescado de otras regiones y las constantes muestras de solidaridad españolas no impedirán que los productos gallegos tengan salida.

Desde la Asociación Nacional de Grandes Empresas de Distribución, Anged, (que agrupa, entre otros a El Corte Inglés, Eroski, Carrefour y Alcampo), su portavoz, Antonio Bernabéu, estima que las ventas en el período navideño se incrementarán entre un 12% y un 15% sobre el resto del año. Esta época también propicia un incremento de la contratación temporal sobre la plantilla normal. Los puestos que más se crean en el sector comercial y de servicio son los de cajeros, reponedores, vendedores de electrodomésticos y los ayudantes de productos frescos.

Juguetes y móviles

Este año la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ) no tiene claro cuál será su producto estrella. En el ejercicio anterior lo fue el patinete, pero ahora no se vislumbra un seguro ganador. Pero no faltan los anuncios que invaden la pantalla de la tele una y otra vez y que promocionan muñecas, juegos didácticos, muñecos que escalan imitaciones de montaña y otros más. La AEFJ no cree que 2002 vaya a ser “un año malo”. Lo previsible, explican, es que se venda más que el año pasado. En la campaña de Navidad y Reyes se vende alrededor de un 70% o 72% del total de los juguetes comprados en el conjunto del año. Estas fechas, según la AEFJ, el gasto de los españoles en este apartado será de 608 millones de euros. Los jugueteros son optimistas: en 2001 la facturación alcanzó la cifra de 952,6 millones de euros, lo que supuso un 9,1% más que en 2000 y en esta ocasión se espera superar ese dato.

El sector de la telefonía móvil no se quedará atrás en Navidad. Las empresas aseguran que cerca de un millón de móviles se venderán en la fiesta de Reyes. El 80% de los compradores se decantará por un modelo de gama baja. Tanto Telefónica como Vodafone y Amena, tratarán, al máximo, de incidir en los modelos de gama baja, que, por lo general, van dirigidos a las tarjetas prepago. En España se calcula que hay 32,4 millones de usuarios de teléfonos móviles.

Ante la imparable euforia consumista de Navidad, las asociaciones de usuarios hacen una serie de recomendaciones que pasan por distribuir equilibradamente el presupuesto o adquirir sólo lo necesario. Estos son algunos consejos:

• En lo que respecta a la compra de alimentos, la Asociación Valenciana de Consumidores y Usuarios recomienda en su página web hacer una lista detallada de lo que realmente se necesita antes de salir a comprar, para evitar así los gastos compulsivos.
• Recurrir a los menús tradicionales (pavo, besugo, cordero, etc) para evitar un gasto adicional en productos que se encarecen en este período como el salmón, el caviar y los mariscos.
• A la hora de comprar juguetes se debe tener en cuenta que el exceso de publicidad influye considerablemente en los usuarios. Por ello se recomienda escoger juguetes que estimulen la destreza y habilidades del niño. En ocasiones, los juegos más complicados son los más caros y los que se rompen con mayor facilidad. Hay que tener en cuenta las indicaciones que hacen referencia a la edad.
• Los consumidores deben ser precavidos si efectúan compras en cadenas de todo a cien, pues en algunos de estos comercios se ofrecen productos de baja calidad y sin garantías que pueden resultar peligrosos.
• En lo que respecta a la fiesta de Nochevieja, la Asociación Valenciana de Consumidores aconseja, entre otras cosas, ser muy selectivo la hora de elegir el local o la sala donde se acudirá. Ésta debe estar debidamente autorizada y contar con la respectiva licencia.

La CEACCU también recomienda adelantar las compras, pues así el consumidor podrá comparar precios en distintos establecimientos y sufrirá menos las consecuencias de las prisas.