El año 2020 se ha cobrado, hasta el momento, la vida de más de 320.000 españoles, según datos del Índice Nacional de Defunciones. Ha habido más decesos de lo habitual por la covid-19, pero también más incineraciones “prescritas” por los expertos sanitarios para las muertes provocadas por el coronavirus. Ahora bien, cuando es posible escoger el modo de enterramiento, ¿cuál se utiliza más y qué tipo de sepelio cuesta menos? La tendencia es cada vez más favorable a la cremación, que hasta hace muy poco tiempo era más económica. Sin embargo, la popularización de las incineraciones ha hecho que la parafernalia que rodea a esta clase de sepelio se asemeje al de las inhumaciones: columbarios, urnas cinerarias de calidad… Todo ello ha provocado que ambos tipos de entierro tengan costes similares. Así, los servicios básicos tanto de inhumaciones como incineraciones superan los 1.000 euros de media.
¿Incineración o entierro tradicional?
En España, hasta hace poco tiempo, eran escasas las personas que se planteaban incinerar los restos mortales de sus familiares. Una situación que está cambiando de manera radical en los últimos años, pues la tendencia «muestra claramente que la gente se va inclinando cada vez más por la cremación en detrimento del entierro clásico o inhumación», señalan desde el comparador de servicios funerarios Cofune. En general, los menores de 65 años que prevén su sepelio escogen la cremación mayoritariamente, mientras que «entre los mayores de 65 años aún es la inhumación la forma preferida», a pesar de que ambas opciones están cada vez más igualadas.
¿Pero qué sale más barato?
Cuando empezaron a realizarse las primeras cremaciones, este tipo de funeral suponía un ahorro importante para quienes lo escogían porque eliminaba el gasto del nicho, de la lápida, del servicio de inhumación, etc. Sin embargo, en la actualidad, en muchos cementerios e incluso iglesias existen columbarios y, además, hay urnas de todo tipo y calidades, lo que en la práctica ha supuesto casi la equiparación de los precios de ambas modalidades, «y en algunas ciudades, incluso sale más cara la incineración», aclaran.
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El coste de una incineración
- ¿Qué coste medio tiene una cremación? Como apuntan los expertos, el importe medio de las cremaciones varía mucho dependiendo de la provincia en la que residamos, pero supera los 1.000 euros en todo caso. Por ejemplo, «un servicio de incineración básico en Madrid tiene un coste medio de 1.950 euros, en Valencia es de 1.200 euros, en Sevilla cuesta 1.300 euros…”, detallan los funerarios.
- ¿Qué incluye el servicio de cremación? La incineración básica consta del féretro, la incineración, la entrega de las cenizas en una urna, la recogida y el traslado del difunto hasta el crematorio, así como las gestiones y los trámites necesarios. En algunos casos también se añaden servicios religiosos y un centro de flores.
- ¿Qué encarece este sepelio? Este tipo de entierro sube de precio —puede hacerlo de manera notable— cuando el usuario solicita una sala velatorio. Y, sobre todo, «el precio del servicio puede subir mucho en función del tipo de féretro escogido y sus calidades».
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Cuánto cuesta una inhumación
- ¿Cuánto cuesta un entierro? En el caso de las inhumaciones sucede lo mismo que con las cremaciones: el precio varía según las provincias, aunque también una inhumación básica supera los 1.000 euros de media. Así, «en Madrid está sobre 1.750 euros la inhumación básica, en Valencia cobran 1.000 euros, en Sevilla cuesta 1.400 euros o en Alicante 1.600 euro», comentan los especialistas.
- ¿Qué se incluye en el entierro básico? Un servicio de inhumación consta de lo mismo que el de cremación, salvo lo específico de ese otro servicio: el féretro, la recogida y el traslado del difunto hasta el tanatorio o iglesia y todas las gestiones y trámites burocráticos. Además, por lo general, se incluyen una mini lápida y también muchas veces una corona y un centro de flores, así como los recordatorios y los servicios religiosos que requiera la familia.
- ¿Qué plus encarece este tipo de sepelio? En una inhumación, el féretro es también lo que más encarece el servicio, ya que una calidad extra sube mucho el coste. Asimismo, si la familia reserva una sala de velatorio (más aún si incluye servicio de comida para los familiares y acompañantes), el precio del servicio aumenta.
La cremación directa es cada vez más común en los países anglosajones, pero apenas conocida en España. No se ofrece en nuestro país, aunque una funeraria no puede negarse a ello si el cliente lo solicita, como explican en su web los expertos de Funeral Natural. Asimismo, señalan que estos servicios funerarios son más baratos porque simplifican al máximo.
¿Qué es la cremación directa? Se trata de un servicio muy simple, pues prescinde de todos los trámites funerarios salvo la incineración. Se hacen cargo del cuerpo del fallecido, realizan la cremación (sin féretro o con féretros ecológicos, de cartón, etc. que son mucho más económicos) y entregan después las cenizas a sus familiares. Tras ello, la familia celebrará la ceremonia de despedida de su ser querido en el momento y del modo en que sus miembros decidan.
