España es un país rural, aunque la mayoría de la población se marchó a las ciudades en los años 70. Sin embargo, las sucesivas crisis, el deseo de una vida más tranquila y ecológica y, en gran medida, la pandemia y los meses de confinamiento han hecho que algunos vuelvan a casa. Si es tu caso, puedes volver y montar un negocio, ya que hay algunos proyectos que resultan novedosos y útiles en pequeños municipios aunque en las grandes poblaciones estén muy manidos. En este artículo te damos ideas sobre qué negocio montar en un pueblo, cuáles pueden ser rentables y qué debes tener en cuenta antes de poner en marcha una empresa.
Cuáles son los mejores tipos de negocios para montar en un pueblo
Al margen de montar un casa rural o de realizar teletrabajo, en un pueblo pueden tener éxito estos otros negocios:
1. Negocios básicos: cafetería, alimentación…
En muchos pueblos pequeños, el pan, la leche, etc. llega en furgoneta una vez cada cinco días. Si es un buen negocio tener una de estas furgonetas-supermercado que surtan a varios pueblos de una comarca, en función del número de habitantes también puede serlo montar las tiendas básicas y que siempre funcionan: panadería, bar cafetería, etc.
2. Dentista
Para mantenerse sano es esencial cuidar la boca con regularidad y acudir al dentista. Los servicios médicos básicos suelen estar cubiertos (aunque a veces hay que desplazarse a pueblos cercanos), pero los de un odontólogo o dentista son difíciles de encontrar en localidades con pocos habitantes. Por ello, montar la consulta en un pueblo puede ser una salida laboral con éxito.
3. Veterinario
Vacas, ovejas, cabras, cerdos, caballos… En el campo la vida está ligada a los animales, que a veces son básicos para la subsistencia de las familias. Por ello, los servicios de veterinario tienen una elevada demanda, dado que el coste de perder un animal puede ser muy alto.
4. Peluquería
Vivir en un pueblo pequeño no significa ir desarreglado. Peluquerías modernas, que además incluyan servicio de manicura y pedicura, limpiezas faciales, depilación, etc. pueden tener mucho éxito en las localidades pequeñas. Si quieres ir más allá, puedes hacer el servicio a domicilio. Es muy práctico para el cliente y muy barato de poner en marcha, ya que en este caso no habría necesidad de contar con un local.
5. Cuidado de mayores
En España, hay 9,28 millones de personas mayores de 64 años, según datos de 2020 del Instituto Nacional de Estadística. Las que viven en zonas rurales no siempre tienen la posibilidad de acudir a centros de día o recibir ayuda en casa. Hay zonas donde todos los negocios relacionados con los ancianos pueden tener éxito: desde un centro de estimulación cognitiva hasta la rehabilitación y adaptación de viviendas, pasando por realizar y servir comidas a domicilio, ofrecer servicios de planchado y asistencia en casa. Los servicios y negocios asociados a la edad son una apuesta de éxito casi asegurado.
6. Cultivo y venta de productos ecológicos
Miel, tomates, huevos frescos… La comida sana y natural vende. Los cultivos seguidos paso a paso por el agricultor y realizados de manera natural tienen mucho éxito. Además, en las zonas agrarias es muy fácil de poner en marcha y tienen numerosos potenciales clientes, sobre todo entre los habitantes de las ciudades. También se puede criar gallinas y vender huevos ecológicos o convertirse en apicultor.
7. Gimnasio o centro de meditación
Aunque casi todas las localidades cuentan con polideportivos municipales, no todas brindan los servicios que pueden encontrarse en un gimnasio. En este caso, habría que identificar muy bien las necesidades de la población. Además, se puede vender ropa deportiva especializada en el gimnasio, prendas muy demandadas.
Otra opción es abrir un negocio de yoga o meditación, tanto para los oriundos como para turistas que busquen pasar unos días de serenidad en un entorno rural.
8. Conductor o reparación de vehículos
Hay pueblos a los que no llegan los autobuses o tienen una escasa frecuencia de paso. Para acudir al hospital, hacer compras en localidades grandes, etc. hay personas de edad avanzada que ya no pueden conducir. Conseguir una licencia de taxi o VTC para transportar viajeros puede ser buen negocio.
También podría serlo tener un taller de reparación de vehículos, tanto de coches como especializado en vehículos utilizados en el campo.
9. Reparación de móviles y ordenadores
La venta de tecnología puede funcionar, pero también las ventas por Internet se han incrementado mucho. Sin embargo, lo que se necesitará, con toda seguridad, es tener un negocio de reparación de móviles y ordenadores, ya sea para particulares o para las empresas de la localidad y pueblos cercanos.
1o. Regalos personalizados o de inspiración local
Las bolsas, tazas, cuadernos o camisetas personalizadas tienen una gran demanda. Además, para montar este negocio no se necesita una gran infraestructura y se puede hacer desde casa y a distancia. Como son productos sencillos, el cliente casi siempre queda satisfecho. Además, teniendo en cuenta las tradiciones y el folclore, las piedras, conchas o cerámica propias del pueblo se pueden transformar en pendientes, collares o pulseras. Se trata de negocios destinados, sobre todo, a los turistas.
Imagen: pasja1000
Consejos para montar un negocio rentable en un pueblo pequeño
✅ ¿Qué necesita mi pueblo?
Es casi la primera pregunta que hay que hacerse si piensas montar un negocio. Las necesidades no son las mismas en un pueblo pequeño que en una ciudad, incluso si esta es pequeña. Conviene siempre investigar el mercado, los potenciales clientes y pasar una temporada en el pueblo observando los usos de los habitantes antes de montar un negocio.
✅ Buenas comunicaciones
La existencia de una buena red viaria es fundamental si tienes un negocio (para que te llegue la mercancía o tú puedas enviarla, etc.). También es imprescindible estar conectado con Internet, etc. Es un aspecto que no debes pasar por alto si quieres que trabajar en un pueblo sea rentable.
✅ Esfuerzo y trabajo
En cualquier trabajo, y en cualquier lugar, el esfuerzo y el trabajo son la clave. En un pueblo, y al montar un negocio nuevo, debes añadir la paciencia. No siempre se triunfa desde el momento en que abres tu negocio, sino que hay proyectos a medio o largo plazo, pero que compensan.
✅ Centrarte en una actividad que domines
Es importante que te centres en una actividad que conozcas bien o para la que tengas cualidades especiales, con el fin de poder diferenciarte de la competencia. Y si el negocio que quieres abrir es una novedad para ti, fórmate bien antes de ponerlo en marcha.
✅ Tener habilidades sociales y ser respetuoso
Si quieres montar un negocio debes dominar las relaciones sociales, parte intrínseca de un negocio rural. Además, debes ser siempre respetuoso con las tradiciones, la cultura, la gente y la naturaleza del pueblo donde pondrás tu negocio en marcha.
Qué factores debes tener en cuenta antes de poner el proyecto en marcha
✅ Personales
- Vivir y trabajar en un pueblo no es fácil. Si no estás convencido de vivir en un municipio pequeño, piénsatelo dos veces, pues dar marcha atrás después de haber hecho una inversión económica y emocional no siempre es posible.
- Si tienes hijos, busca un pueblo con colegio e instituto, o que esté cerca de una localidad con centros escolares.
- Busca un pueblo cercano a servicios médicos como hospital, centro de salud…
- Escoge una localidad que, aunque sea pequeña, esté bien conectada.
✅ De negocio
- Buena conexión a Internet: actualmente es pieza clave en cualquier tipo de negocio.
- Buenas carreteras, línea ferroviaria, etc. son imprescindibles para las relaciones comerciales.
- El número de habitantes y su edad marcarán definitivamente qué negocio puede tener éxito. En un pueblo con muchos jóvenes puedes montar un gimnasio, pero si hay mayoría de mujeres ancianas, una peluquería puede ser lo idóneo.
- Estudiar que sea viable en esa zona: no debe haber muchos negocios similares y debe haber la suficiente demanda. Además, es importante tener en cuenta qué producto ofreces y adecuarlo al lugar.
- ¿Tiene turistas? ¿Y de qué tipo son? Si se trata de una localidad turística, las posibilidades se multiplican, aunque hay que estudiar el tipo de turismo: cultural, familiar, de fiesta… para ofrecer servicios o productos que cubran sus necesidades.
- El capital con el que cuentas y el margen (colchón) que tienes en caso de que tardes más de lo previsto en despegar.