La selectividad está cada vez más cerca. Todos los estudiantes de bachillerato que quieran ingresar el próximo curso 2011-2012 en la universidad deberán superar esta prueba de acceso. Para algunos será más difícil que para otros. A quienes opten por una titulación sin límite de plazas les bastará con examinarse de la fase general (cuatro o cinco materias, según la autonomía), pero quienes elijan un título con exceso de demanda y quieran mejorar la calificación, tendrán que realizar también la fase específica, que abarca hasta cuatro materias más de modalidad. Las universidades han establecido un parámetro de ponderación para las asignaturas de esta fase de 0,1 o 0,2, según la vinculación con el título al que se desea acceder. Quienes opten por las asignaturas con mayor parámetro podrán sumar hasta cuatro puntos más y situarse por delante de quienes no hayan realizado la fase específica o se hayan examinado de las materias con un factor de ponderación inferior.
Parámetros de ponderación
La nueva selectividad, regulada por el Real Decreto 1892/2008, contempla una forma de calificación distinta a la anterior prueba, que afecta a los alumnos que desean ingresar en titulaciones en las que el número de solicitudes de admisión supera a las plazas ofertadas. Los estudiantes que optan por un Grado en el que no hay exceso de cupo, tan sólo necesitan examinarse de la fase general de la prueba, con tres ejercicios de las materias comunes y uno de materia de modalidad. Quienes pretenden ingresar en un título con concurrencia competitiva, podrán realizar también los ejercicios de la fase específica para elevar la nota de admisión a la universidad y tener así más posibilidades de acceso al título elegido.
Las universidades han determinado el grado de relación de las materias de modalidad de segundo de bachillerato con cada una de las titulaciones de la rama de conocimiento a la que están adscritas. A cada asignatura le han aplicado un factor de ponderación respecto a un título. Este parámetro para ponderar puede ser de 0,1, o elevarse hasta 0,2 en las materias que consideren más idóneas para seguir con éxito las enseñanzas superiores.
El alumno que opte por las asignaturas con mayor parámetro podrá sumar a la nota de admisión hasta cuatro puntos más
De esta manera, el alumno que opte por las asignaturas con mayor parámetro podrá sumar a la nota de admisión hasta cuatro puntos más y situarse en una posición preferente respecto a quienes no hayan realizado la fase específica y quienes se examinen de las materias en las que el factor de ponderación sea inferior. Si un estudiante desea ingresar en Medicina en una universidad de Andalucía, le interesa examinarse al menos en la fase específica de Biología y Química, que son las dos materias de la rama de conocimiento de Ciencias de la Salud que ponderan por el factor 0,2; si obtiene la nota mínima (5) en una de estas asignaturas, sumará a la calificación final los mismos puntos (1) que si obtuviera la máxima calificación (10) en una materia de modalidad que se pondere por el factor 0,1.
Si el estudiante ya conoce la titulación que quiere cursar y en la universidad que desea ingresar, debe consultar el grado de relación que el centro ha establecido entre las asignaturas de bachillerato y sus titulaciones, ya que el parámetro de ponderación de una materia específica para un mismo título puede ser diferente en cada institución de enseñanza superior.
Calcular la nota de admisión
La nota de admisión en la universidad es el resultado de la media ponderada de la nota obtenida en el Bachillerato (60%) y de la calificación lograda en la fase general de selectividad (40%). Se considera superada cuando el estudiante consigue una puntuación igual o superior a 5, siempre que haya logrado un mínimo de 4 puntos en la fase general. La nota máxima que se puede obtener es 10 puntos.
Fase general: la calificación es el resultado de la media de las puntuaciones obtenidas en los ejercicios de esta fase (tres o cuatro de materias comunes más un ejercicio de materia de modalidad). Se supera si se alcanza al menos 4 puntos.
Los ejercicios de la fase específica se consideran superados si se alcanza una puntuación igual o superior a 5
Subir nota: los resultados obtenidos en los ejercicios de la fase específica de la prueba servirán para elevar la nota cuando la titulación elegida por el estudiante tenga establecido un límite de admisión en sus aulas. En estos casos, la nota de admisión en la universidad se calculará de la siguiente forma: 60% nota media de Bachillerato + 40% calificación de la fase general + parámetro de ponderación x calificación de materia de modalidad (1) + parámetro de ponderación x calificación de materia de modalidad (2). Los ejercicios de esta fase se consideran superados si se alcanza una puntuación igual o superior a 5. El máximo que se puede obtener es 4 puntos.
Diferentes notas de admisión: a partir de ahora, el estudiante puede tener una nota de admisión distinta en función de la titulación y la universidad por la que opte. Si en una carrera las materias de modalidad elegidas se consideran prioritarias y tienen un parámetro de ponderación de 0,2, la nota media de admisión será distinta que la del mismo estudiante en otro título que, aunque sea de la misma rama, no le otorga a estas asignaturas la misma prioridad y el factor de ponderación es de 0,1.
Ejemplo de cálculo de nota de admisión:
Los cambios
Los estudiantes que optan por un Grado en el que no hay exceso de cupo, tan sólo necesitan examinarse de la fase general
Hasta el curso 2008-2009, todos los estudiantes que se presentaban a la prueba de acceso a la universidad en nuestro país tenían que realizar el mismo número de exámenes: tres correspondientes a la fase general (cuatro en las comunidades con lengua cooficial) y otros tres de materias de modalidad y optativas. Sin embargo, desde el pasado curso 2009-2010, los bachilleres pueden optar entre evaluarse en selectividad de un mínimo de cuatro ejercicios y un máximo de ocho (cinco y nueve si se tiene en cuenta la lengua cooficial). La cifra variará en función de la titulación universitaria que haya elegido el estudiante.
La fase específica tiene por objeto evaluar los conocimientos del alumno en unos ámbitos disciplinares concretos relacionados con los estudios universitarios que desea cursar. El estudiante puede examinarse de hasta cuatro asignaturas de modalidad que estén adscritas a la rama de conocimiento de la titulación en la que pretenda ingresar. Las dos puntuaciones más altas obtenidas en estas materias se añaden a la nota final mediante un sistema de ponderación.
Ponderación para FP
Los estudiantes de Formación Profesional no necesitan realizar la prueba de acceso
La nueva estructura de la selectividad también afecta a los titulados en Formación Profesional que desean proseguir sus estudios en la universidad. Los estudiantes de estas enseñanzas no necesitan realizar la prueba de acceso, si desean ingresar en una titulación sin límite de plazas, su nota de referencia corresponde a la nota final que hayan logrado en el ciclo formativo cursado. Sin embargo, para equiparar esta calificación a la de sus homólogos de bachillerato en las carreras con mayor demanda, los alumnos de FP pueden elevar su nota y realizar la fase específica de la selectividad en las mismas condiciones que los bachilleres y con idénticos criterios de ponderación.