El vehículo explorador de la Agencia Espacial de EE.UU. (NASA) «Spirit» ha descubierto pruebas de la existencia de cenizas volcánicas cuyos minerales fueron disueltos por la presencia de agua en el planeta Marte.
Según informó la NASA, este hallazgo ha tenido lugar sobre una capa estratificada de rocas diez meses después de que el pequeño vehículo descendiera sobre la superficie del planeta y en las cercanías de la zona conocida como las Colinas de Columbia.
«Nuestra hipótesis principal es que estas rocas fueron ceniza volcánica que cayó desde el aire… y que los minerales contenidos en ella fueron disueltos por el agua», dijo Ray Arvidson, científico principal de la misión.
Arvidson aclaró que, aunque es una hipótesis, los instrumentos del «Spirit» parecen confirmar que se trata de cenizas volcánicas. «Es importante señalar que acabamos de comenzar a determinar la textura, mineralogía y química de estas rocas estratificadas», declaró.
El científico añadió que otra hipótesis sobre su origen se centra en la posibilidad de que esos materiales fueran transportados y depositados por el agua. «En efecto, es posible que la actividad volcánica, el agua y el viento hayan producido las rocas que está examinando el ‘Spirit’ en estos momentos», apuntó.
El vehículo está operando regularmente con sus espectrómetros pese a que está sufriendo problemas en sus ruedas, dijo Jim Erickson, director del proyecto en el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de la NASA, en Pasadena (California).
«Estamos tratando de resolverlos, pero esto podría ser un anticipo de lo que va a ocurrir debido a que los componentes mecánicos se han desgastado como consecuencia de la prolongada exploración en Marte», agregó Erickson.