Cada vez son más los jóvenes que no logran terminar la Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Según datos del Ministerio de Educación, entre 2002 y 2004 el porcentaje de fracaso escolar en España estaba estancado, pero desde 2005 la cifra se ha disparado y ha aumentado 1,1 puntos, hasta alcanzar un tope del 29,6%.
Los datos, que han sido publicados por el periódico profesional de la enseñanza «Magisterio», revelan la desigualdad geográfica y por sexos que existe dentro del sistema educativo español. Las diferencias no son sólo de enorme magnitud sino que han crecido en los últimos años.
Desigualdad geográfica
Asturias ofrece la menor tasa de abandono escolar, con un 14,9%, seguida del País Vasco (16,5%) y Navarra (18,5%). Los resultados más negativos se obtienen en Baleares, con un porcentaje del 38,2%, Comunidad Valenciana (35,9%) y Canarias (35,2%).
Las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, por su parte, registran unas elevadas tasas de fracaso escolar, del 49,9% y del 42,4% respectivamente. Ambas se encuentran aún bajo la gestión del Ministerio de Educación.
Por sexos, los chicos salen perdiendo -con un 36,3% de abandono- frente a las féminas, de las que sólo el 22,5% deja los estudios.
El fracaso masculino es 14 puntos mayor que el femenino
El fracaso escolar se calcula hallando la tasa bruta de graduados en cuarto de Secundaria y restando ese resultado a 100. El número expresa el porcentaje de la población que abandona el sistema educativo sin título de Graduado en ESO.
Según el autor del estudio, estos son «los datos oficiales, aunque algunas comunidades ofrecen como fracaso escolar la tasa de titulación en cuarto de ESO sobre los matriculados ese curso: dicho cálculo es incorrecto, pues obvia a los que abandonan el sistema antes de llegar a cuarto de ESO, pero como es claramente menor en las comunidades autónomas que peor van, lo siguen utilizando».
Medidas
Consciente de que el porcentaje de alumnado que abandona los estudios es muy superior al de la media europea, por ejemplo la Consejería de Educación de Andalucía ha anunciado una batería de medidas: contratará a 15.000 profesores hasta el año 2012 y aumentará las horas lectivas en asignaturas como lengua y matemáticas. Incrementará los refuerzos educativos en horario de tarde para el alumnado más rezagado y arbitrará nuevas fórmulas para que los jóvenes que en su día abandonaron el sistema educativo puedan reengancharse.
El estudio subraya que la diversificación del currículo en la ESO puede ser una buena solución para mantener en el sistema a todo ese alumnado que no quiere seguir estudiando pero tiene interés por aprender un trabajo. «El 60% de los países más desarrollados aplica este sistema de diversificación y con muy buenos resultados. No se debe rebajar el nivel para que todos logren su título de ESO, hay que hacer un sistema educativo interesante para todos, brindando oportunidades para los escolares, los que quieren continuar sus estudios y los que prefieren aprender un oficio».