El Consejo de Gobierno de Andalucía aprobó ayer el decreto que desarrolla la ley reguladora de las investigaciones con células madre embrionarias no viables para la fecundación in vitro, y que permitirá el desarrollo de los cinco proyectos para avanzar en la investigación de tratamientos de enfermedades como la diabetes, Parkinson y regeneración ósea.
El consejero andaluz de Salud, Francisco Vallejo, manifestó en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno -que se celebró en el Parlamento andaluz- que a partir de la aprobación de este decreto, las investigaciones con células embrionarias podrán comenzar en Andalucía, aunque reconoció que a partir de ahora podría materializarse el anuncio del Gobierno central de que presentará un recurso de inconstitucionalidad a la normativa de la comunidad andaluza.
Según el consejero, si al final se produce el recurso, el Consejo de Gobierno tiene previsto y preparado un nuevo decreto -que se aprobaría en la reunión del Ejecutivo de la próxima semana- que modificaría el aprobado ayer y que consistiría, a grandes rasgos, en desarrollar la Ley Estatal de Reproducción Asistida.
Comité de investigación
El decreto aprobado recoge los mecanismos de organización, composición y funcionamiento del Comité de Investigación con Preembriones Humanos, órgano que garantizará que los proyectos y la donación de los preembriones se ajusten a la legalidad vigente, según explicó Vallejo.
Además, y entre otros aspectos, se determinan los requisitos que han de cumplir los proyectos de investigación para ser autorizados, se fijan las condiciones de los centros donde se realizarán estos estudios y se regulan el consentimiento informado y las obligaciones que deben cumplir los centros y servicios de reproducción asistida.
El Comité de Investigación con Preembriones Humanos, adscrito a la Consejería de Salud, autorizará los trabajos en esta materia, establecerá las líneas de seguimiento de los preembriones a lo largo del proceso (identificación de donantes, almacenamiento y laboratorio de destino) y se encargará de mantener una base de datos de acceso público con las investigaciones iniciadas.
Este órgano supervisor estará integrado por un representante de la Comisión Autonómica de Ética e Investigación Sanitaria, otro de la Coordinación Autonómica de Transplantes, dos de asociaciones de pacientes beneficiarios de las investigaciones, un experto jurista en la materia y cinco especialistas de prestigio en investigación básica, clínica, técnicas de reproducción asistida, embriología humana y genética.
Igualmente, se recoge la creación de un registro de los preembriones conservados que los centros de reproducción asistida han puesto a disposición de los proyectos.