Erasmus se renueva. A partir del 1 de enero de 2014, no solo amplía su nombre -será Erasmus+-, sino también su presupuesto y ámbito de influencia. Se dirigirá a personas entre 13 y 30 años que quieran mejorar su formación y realizar prácticas fuera de nuestras fronteras. A continuación se explican las novedades de Erasmus+, las ayudas con que se contarán y las mejoras previstas en educación superior y Formación Profesional. Entre otras cuestiones, Erasmus+ eleva su presupuesto, propone becas para programas deportivos y aúna otros programas como Comenius y Erasmus Mundus.
Principales novedades de Erasmus+
Erasmus+ responde a las consecuencias de la crisis económica y las tasas elevadas de desempleo juvenil
El próximo 1 de enero entrará en vigor Erasmus+, un programa previsto para el periodo 2014-2020, cuyo reto es responder a las consecuencias de la crisis económica y las altas tasas de paro juvenil. «Seis millones de jóvenes están desempleados en la UE» y hay «más de dos millones de puestos de trabajo por cubrir», explican sus impulsores. El nuevo programa se adaptará a las necesidades del mercado laboral a través de varias medidas.
Unificación de todos los niveles y programas. Entre las novedades, Erasmus+ abarca todos los niveles educativos –escolar, Formación Profesional (FP), enseñanza superior y formación de personas adultas– y fusiona los programas de aprendizaje Grundtvig, Erasmus, Leonardo y Comenius, junto con los programas Erasmus Mundus, Tempus, Alfa, Edulink y programas bilaterales de cooperación, además de Juventud en Acción. Aúna iniciativas en materia de educación, formación, juventud y deporte.
Más presupuesto y más beneficiarios. Este nuevo programa amplía en un 40% el presupuesto disponible, de manera que extenderá su radio de acción a alumnos de enseñanza superior, FP, profesores, formadores, personal del sector educativo y jóvenes trabajadores, estudiantes de máster y jóvenes que quieran ser voluntarios. Además, se potenciará la movilidad para la realización de prácticas en el extranjero.
Deporte. Esta es la primera vez que se incluye un presupuesto específico para financiar el deporte, tanto en forma de becas deportivas, como ayudas a asociaciones deportivas y para sufragar acontecimientos europeos no comerciales. Este apartado supondrá el 1,8% del presupuesto.
Financiación para estudiantes de máster. Para quienes realicen un máster completo en el extranjero -que hasta ahora carecen de becas o préstamos nacionales-, se habilitará «un nuevo mecanismo de garantía de préstamos gestionado por el Fondo Europeo de Inversiones». Las ayudas también se contemplan para «personal de la educación y la formación y jóvenes trabajadores, además de para asociaciones entre universidades, centros de secundaria y primaria, empresas y organizaciones sin ánimo de lucro».
Ayudas con Erasmus+
Se calcula que Erasmus+ supondrá la obtención de una beca para más de cuatro millones de personas. Para este fin se destinará un presupuesto de 14.700 millones de euros: un 40% más que en la actualidad. Esta cantidad se distribuirá entre becas individuales y asociaciones, para repartir ayudas al estudio, la formación, el trabajo o el voluntariado en un país extranjero.
Las ayudas servirán para el estudio, la formación, el trabajo o el voluntariado en un país extranjero
Jorge Martín, presidente de la Federación de Asociaciones Erasmus Student Network España, muestra su preocupación después de la última modificación respecto a las becas Erasmus, cuyas condiciones para acceder al complemento económico que concede el Ministerio de Educación establecen que solo pueden optar a él los estudiantes que el curso anterior obtuvieron una beca general. Señala que mientras la Comisión Europea apoya el programa, aún no se ha definido cómo se gestionará desde España, por lo que se revela inquieto ante el futuro.
Por su parte, Amaya Mendikoetxea, vicerrectora de Relaciones Internacionales de la Universidad Autónoma de Madrid, estima que la educación superior «está sufriendo un proceso de globalización en el que la movilidad juega un papel central», por lo que aboga por mantener la ayuda lineal del Ministerio y pide «un reparto más favorable para España del dinero de la Comisión Europea, la principal fuente de financiación de este programa».
En cuanto a la distribución del presupuesto, este se dividirá en cuatro partes: ayudas individuales para fomentar la movilidad (63%), cooperación para la innovación y el intercambio de buenas prácticas (28%), apoyo a la reforma de la política (4,2%) y fondos que se redistribuirán entre los dos primeros capítulos (4,80%). Por sectores, el reparto será superior en enseñanza superior (43%), Formación Profesional -Vocational education and training, VET- (22%), colegios (15%) y educación para adultos (5%). El 15% restante se asignará en función de las necesidades.
La educación superior es la principal apuesta de Erasmus+. Sobre todo se quieren mejorar las habilidades de los jóvenes para reducir la elevada tasa de desempleo entre ellos, por lo que se hará hincapié en su formación, pero también se ampliarán las oportunidades para realizar prácticas en el extranjero o cursar estudios de máster. Del mismo modo, se potenciará el papel de las empresas para que los jóvenes puedan acceder a ellas y analizar casos reales, mientras que se respaldará el desarrollo profesional de personal académico y no académico.
Pero también se han previsto cambios en FP. Se persigue impulsar la realización de prácticas en el extranjero, ya vigentes en la actualidad, que se podrán llevar a cabo en empresas, entidades públicas u ONG, entre otras. Incluso será posible estudiar en un centro extranjero de FP y alternar esta experiencia con periodos de prácticas. Junto con estas acciones, se ha previsto el intercambio de buenas prácticas y nuevos materiales y métodos de formación.