La Agencia Espacial Europea (ESA, por sus siglas en inglés) ha anunciado que espera lanzar su primer satélite del programa Galileo a bordo del cohete ruso Soyuz en el 2005. Galileo es un plan europeo para crear su propio sistema de navegación global por satélite. Sus usos van desde ayudar con mapas de navegación electrónicos motorizados hasta asistir en operaciones de búsqueda y rescate.
La ESA tiene previsto que el programa Galileo esté en servicio en el 2008 y tenga 30 satélites en órbita a casi 24.000 kilómetros de la Tierra. El primer satélite requiere una programación ajustada para empezar a transmitir señales en junio del 2006. De lo contrario, el proyecto corre el riesgo de perder sus derechos de localización en las frecuencias de radio.
El proyecto sería rival del Sistema de Posicionamiento Global (GPS, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, y será interoperable tanto con GPS como con GLONASS, el sistema de navegación global por satélite de Rusia.
La ESA ha calculado que Galileo podría traer beneficios económicos y sociales, que alcanzarían los 74.000 millones de euros para el 2020, y crearía 140.000 empleos.
Los servicios de lanzamiento de la Soyuz los aporta la compañía ruso-europea «Starsem», que es controlada de manera conjunta por la casa matriz de Airbus EADS y la compañía europea de lanzamiento Arianespace.
Un consorcio formado por EADS, Alcatel y Thales, de Francia; Inmarsat, de Inglaterra; Finmeccanica, de Italia, y AENA e Hispasat, de España llevará a cabo gran parte del proyecto, el cual estará gestionado por la Junta Empresarial de Galileo, compuesta por la Comisión Europea y ESA.
En la financiación de Galileo, la Unión Europea (UE) encontró el apoyo de socios internacionales como China e Israel. El presupuesto será de 2.100 millones de dólares.